Cap 19

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Pov Lucero...

Llegue a casa demasiado cansada, esperaba que mi madre me recibiera en la sala con cara de pocos amigos, pero no fue así, me encontré un abrumador silencio en casa, solo me dirigía a la cocina por un poco de agua y me iría a dormir, cuando llegue vi que había alguien en mi cama, pero no era mi madre, al instante reconocí esa silueta

Lucero: que hace aquí- me pregunte en voz baja no entiendo, resulta que Silvia esta durmiendo en mi recamara- Silvia, despierta que haces aquí- hable ya en un tono bastante alto, o eso creo por que se despertó al instante

Silvia: Llegaste

Lucero: es obvio no ves- dije irónica y aunque no quería hablarle así mi subconsciente me traicionaba

Silvia: si que estas enojada, pero por eso estoy aquí

Lucero: habla claro que no te entiendo, no te di permiso de venir  a mi casa y dormir en mi cama, y mucho menos sin mi- oh no, eso jugara en contra

Silvia: Ósea que te molesta es que no duerma contigo, eso tiene solución- dijo mientras se arrodillaba en la cama y de forma sensual gateaba hacia mi, no podía dejar de verla, me repetía una y mil veces "muévete de ahí" pero mi cuerpo no respondía

Lucero: aléjate de mi, no hagas eso 

Silvia: hacer que- dijo mordiéndose de nuevo su labio, y juro que parecía una pervertida mi cara de lujuria debía de decirle todo lo que sentía

Lucero: ya basta, deja de hacer eso, no mas- dije dándome un poco de autocontrol, pero todo acabo cuando termino de salir de las cobijas y vi el diminuto vestido que la estaba cubriendo y como una loca me abalance a ella 

Lucero: escúchame bien Silvia, voy a hacerte el amor ahora mismo y te voy a demostrar que soy mejor que ese imbécil que tienes por novio.

No deje que hablara mas por que ataque sus labios y la empecé a besar desesperadamente mientras la tocaba como quería, ella sabia que estaba a mi merced, mientras la besaba metí mi mano dentro de su braga, haciéndola gemir de inmediato, toque sus puntos débiles como si fuera una guitarra la hice llegar a su primer orgasmo en menos de 5 minutos, pero ella y yo sabíamos que estoy no acababa ahí, así que me senté detrás de ella y la senté para tomarla por detrás, estiro sus piernas y las abrió para  mi y sin pensarlo dos veces introducir mis dedos en esa cavidad profunda, despues de gritos y gemidos senti como sus piernas temblaban en mis caderas, cuando senti que iba a terminar añadí mi otra mano al juego, mientras la penetraba con una mano con la otra tocaba su punto sensible para generarle mas placer y  cuando por fin llego a su orgasmo, me pare de su lado, me incline a su vagina para beber todos su orgasmo sin  desperdiciar nada, sentía como todavía estaba sensible a mi tacto y sin pensarlo más la devore como una fruta, lamí y mordí como yo quise mientras escuchaba como mi nombre resonaba por toda la habitación y imagino que por la casa entera

Silvia: OH CARIÑO, ASÍ ME ENCANTA OH AMOR, LUCERO, LUCERO TE AMO TE AMO

Escuchar como me pedía más me hacia llenar de ego, así que metí dos dedos dentro de ella y sin perder el ritmo con mi lengua la hice llegar al cielo o eso grito ella antes de acabar en mi cara

Silvia: Oh Dios, esto es el cielo

Al terminar con ella baje mis pantalones de trabajo y cuando esta quiso tocarme no se lo permití, la recosté en la cama de nuevo y abrí sus piernas para mi, acople mi cuerpo con el suyo y en un impresionante vaivén de caderas, sentía que Silvia no tenia fuerzas pero quería saciarme de ella y de su cuerpo, sentía que necesitaba mas de ella, no podía parar, con mas fuerza empujaba hacia su centro para que rozara mas con el mío y con lagrimas en los ojos la veía gozar de aquel acto de placer que le estaba brindando

Silvia: te amo, te amo como a nadie

Con esas palabras desato en mi la ultima llama encendida y golpee mas fuerte contra ella haciéndola gritar de placer.

Silvia: oh mi amor, si así eres la mejor

Decía con  sus últimos alientos antes de que hiciera unos movimientos mas y acabar encima de ella con un ultimo suspiro de mi parte, terminé rendida en su pecho y caí derrotada, estaba muy cansada y quería dormir.

Silvia: alguien vino- escuche a Silvia decir eso y me pare como rayo de la cama y me puse la bata de dormir

Lucero: voy a bajara ver quien es, vístete

Deje a Silvia en al pieza mientras esta se vestía y camine a la sala de la casa, pero no había nadie

Lucero: Mary, Mar donde estas- será que habrá salido, por el ruido

Mary: señora, dígame- la escuche decir detrás de mi

Lucero: quien vino?

Mary: es su mamá, vino hace un rato dijo que la esperaría en al sala, yo salí al jardín

Lucero: hace cuanto fue eso?

Mary: hace un buen rato, al rato en que usted llego 

Lucero: oh carajo, esto no puede ser, Mary, me da pena preguntarte pero había mucho ruido?

Mary: yo no se si ella alcanzo a escuchar algo, yo  estaba en el jardín

Lucero: muchas gracias

Silvia: bueno mi amor y quien era?

Lucero: mi madre estuvo aquí, si se fue creo que te escucho gemir, es que eres muy bullosa

Silvia: tu para que me haces todo eso entonces, también es tu culpa pero ya no te preocupes, tengo que hablar contigo 

Lucero: te escucho.



siempre será verdaderoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora