Cap 32

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Amaba pasar tiempo con Lucero y sus hijos, ya vivíamos juntas y estábamos de viaje, después de un gran día agotador para nosotras desperté sin mi mujer al lado, me levante de la cama y salí a buscarla, pero al parecer salió con mi suegra, así que me metí a bañar y me acosté en la habitación a ver televisión, lo que encorte me alivio un poco

Periodista: no se imaginan a quien captaron nuestra cámaras de vacacione en Florida, pues nada más y nada menos que a la Guapísima de Lucero junto con su madre y sus hijos, iban muy felices seguro a desayunar por la hora que era, después de su divorcio a la cantante se le ve feliz y aunque no se acerco a darnos primicia nos saludo y siguió su camino.

Periodista: pero esta guapísima la Lucero, el divorcio le sentó muy bien, se le puede ver las alegre, esperamos pronto pueda contarnos como fue esa etapa en su vida, por el momento sigamos con más noticias.

Cuando termine de ver la televisión respire profundo, gracias al cielo Lucero salió sola esta mañana, espere a que llegaran a la habitación de nuevo mientras preparaba algo para el almuerzo, seguro Lucero no querrá que los chicos coman pizza todos los días del viaje, ambas somos un desastre en la cocina, no sabemos cocinar, pero por lo menos yo no quemo la casa en el intento, prepare algo de pasta la favorita de Lucero claro esta. Pasadas unas horas de la tarde recibí una llamada de su parte

Lucero: mi amor, te llamo por que nos demoraremos más de lo previsto, pasamos por ti para ir a almorzar en un rato 

Silvia: no cariño, vénganse para el hotel, prepare algo de pasta y tengo buenas noticias, ya la casa de míos padres esta lista para nosotros.

Lucero: es excelente, no se si lograste ver pero llegaron unos periodistas al hotel.

Silvia: si amor, vi eso n la televisión, por eso mande a arreglar todo lo antes posible, vengan y almorzamos y si quieren hoy mismo nos vamos para allá

Lucero: claro amor, pero llamaba también para preguntar si querías algo del centro comercial?

Silvia: no empaque mucha ropa interior ni vestidos de baño, puedes ayudarme con eso- le dije de manera Juguetona

Lucero: claro que si mi amor, pero para que ropa interior, si te vez mejor sin ella?

Silvia: amor, no puedo andar por la vida siempre así

Lucero: esta bien, algún color en especifico?

Silvia: los que a ti te gusten, igual tu los vas a quitar así que juega con tu imaginación amor

Lucero: Silvia, cuantas veces te e dicho que por teléfono no se juega con eso?

Silvia: jugar con que amor, solo quiero que mi mujer me quite las bragas esta noche y me haga el amor, eso es malo?- pregunte en tono juguetón y solté un suspiro, que si quería provocarla, claro que si, hace tiempos no tenemos intimidad, desde que salimos de vacaciones nos hemos dedicado a los chicos y eso me tiene un poco ansiosa

Lucero: se que estas ansiosa cariño, yo también lo estoy pero no me puedes hacer esto, mira que estamos un poco lejos y no puedo dejar a los chicos tirados con mi madre, si te tocas sin mi te castigo Silvia- dijo cuando escucho mi segundo suspiro

Silvia: estoy loca por ti mi amor- dije pasando mi mano por mis pechos 

Lucero: creo que si no cuelgo ahora- solté un pequeño gemido al sentir mis pechos en mis manos, creo que solo su voz me pone muchísimo

Silvia: dime que quieres que haga para ti mi amor, solo camina hacia un baño y ordéname que hacer con mi cuerpo, necesito desahogarme un poco mientras espero por ti- dije recostándome en la cama y poniendo mi celular a un costado

Lucero: quiero que quites tu camisa, pero hazlo pensando que soy yo- dijo agitada, su voz se entrecortaba un poco

Silvia: mmm Mi amor, que más

Lucero: ahora toca despacio tu seno derecho, no quiero que tu mano toque todavía tu zona prohibida, Ahora masajea el izquierdo mientras gimes para mi cariño- obedecía a todo lo que Lucero me decía y escuchar su voz me motivaba cada vez más, sabia que en cualquier momento necesitaría tocar ahí abajo, mis instintos eran imposibles de frenar- Sigue así mi amor, ahora quiero que bajes tu mano muy despacio por tu abdomen, pero lento  cariño, no te apresures- como es que conocía tanto, ya sabia que mi mano bajaría rápido- estoy entrando al baño- aviso mientras yo seguí masajeando mis senos- ahora mi cariño, se que ansias tocarte, quiero que masajees tu clítoris despacio, en movimientos circulares, imagina que es mi lengua la que esta ahí abajo, quiero que me pidas más mi amor, así que dale ritmo a tus dedos- dijo Lucero y ya no podía aguantar los gemidos involuntarios que salían de mi, mi liberación iba a ser muy rápida     - sigue así cariño- Dijo suspirando y se que si no estuviera en un lugar publico estaría igual que yo- ahora desliza tus dedos un poco más abajo y quiero que metas 2 rápidamente                              - así lo hice y solté un gran gemido para ella- ahora solo entra suavemente y utiliza tus dos manos mi amor- dijo suspirando aun más fuerte, quiero saber que esta haciendo

Silvia: porque suspiras, que haces- dije entre gemidos

Lucero: solo me toco un poco cariño, pero quiero que sigas el ritmo, ahora entra con más fuerza en ti y aumenta el ritmo de tu otra mano- después de escucharla empecé a hacer lo que me pedía- Silvia, ve más rápido- así lo hice, me moví al compas de mis manos y sin pensarlo ya estaba gritando su nombre sin ser ella quien me tocara, solo pensaba que ella era la que estaba hi abajo, tenia mis ojos cerrados y al abrirlos y mirar hacia abajo me la imagine ahí y ese fue el detonante para terminar llegando al ansiado orgasmo- Eres increíble, suspiro Lucero, no entiendo como puedes ponerme así de loca por ti, ya voy para allá

Lucero dijo que venia para acá, me levante de la cama y recogí el desorden que había dejado después de lo sucedió, cuando menos lo pensé ya Lucero había llegado al hotel junto con su madre y los niños, venían cargados de bolsas


siempre será verdaderoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora