Beautiful Monster (Lena G!P)

17

Cuando vio a Kieran cerrar la puerta pensó lo peor, cerró los ojos y arrugó las sábanas con los puños, dijo que sólo venía a hablar pero ella sabía mejor que nadie cómo habían entrenado a Kieran.

—Repito, no vine a dañarte—Kieran se sentó mirándola fijamente—madre.

Eliza abrió los ojos con pánico—¿D-de veras?

—Si—Kieran simplemente se quedó allí sin acercarse mucho—Pero necesito que me digas lo que sabes, cualquier cosa que ayude a joder a esa hija de puta ¿Son hermanas gemelas?

—No.

—¿Ella está dentro de ti?

—No, es una persona normal—susurró Eliza—solo que es idéntica a mí, nos—tartamudeaba—nos conocimos hace mucho en una fiesta de casualidad, yo iba con Jeremiah y éramos felices. Ella se nos acercó muy impresionada por nuestro parecido y comenzamos una amistad, yo era muy joven y estúpida así que me creí el cuento, pero sólo quería una salvaguarda.

Kieran la miraba estudiando sus expresiones, decía la verdad—¿Qué más?

—Un día los atrapé, a Jeremiah y a ella juntos y él me humilló diciendo que yo era mojigata y estúpida que ella si era una mujer—los ojos de la rubia se humedecieron—me empecé a sentir mal, me separé de él y conocí a Lilian pero no recordaba cómo te habíamos concebido, yo—comenzó a temblar—me enamoré de ella, ella cuidaba de mí y era tan linda conmigo, pero mi mente está fraccionada y estoy confundida, si Lilian te tenía de pequeña significaría que éramos felices y te tuvimos juntas pero yo un día no la vi más y—se tocaba las sienes con dolor—luego te vi allí en esa jaula y mi corazón se rompió por completo—estaba llorando—no podía salir, me sucedía lo mismo, no veía más nada que mis castigos y luego a ti sufriendo lo mismo, muchas veces traté de escaparme de liberarte, pero no había manera, ella estaba tan segura que luego me comenzaba a utilizar, me dejaba salir, sabía que yo no haría nada—miró a Kieran con los ojos llenos de lágrimas—lo siento, lo siento tanto.

Kieran tragó y la miró preocupada, se le acercó con cautela y la abrazó despacio—Oye, no llores más, mataré a esa mujer ¿Sí?

Eliza asintió y pasó lo que no creyó que jamás sería posible, Kieran le acarició el rostro y le sonrió—¿Tú no me odias?

—No, eres mi madre e hiciste lo que pudiste ¿No?

—S-sí pero no fue suficiente sufriste mucho.

—¿Y? No fue tu culpa, te quedaste en ese lugar por mí cuando pudiste haber huido.

—Ya se pero—

—Pero nada, descansa para que luego me cuentes todo lo que sabes de esa zorra malnacida y la voy a matar ¿Sí madre?

El corazón de Eliza palpitaba con fuerza, miró a Kieran allí ahora parada e imponente, su hija era fuerte—Sí ¿P-puedo decirte hija?

—Por supuest—Eliza la jaló con la poca fuerza que tenía a la cama y la abrazó con fuerza.

—Mi hija, mi bebé—sollozó con fuerza—lo lamento tanto.

Kieran se sonrojó—Oye le dije a mi otra madre que te daría un tiro si te ponías empalagosa, ya suéltame.

—No, eres mi bebé—Eliza sonrió con su rostro oculto y lleno de lágrimas y Kieran también sonrió sin poderlo evitar.

—Ah está bien, porque no tengo mi arma cerca supongo que deberé aceptarlo—le acarició la cabeza a la mujer durante un rato hasta que notó que se había dormido producto de la debilidad.