Beautiful Monster (Lena G!P)

3

Sam y Maggie miraron a Kara y Maggs acarició el brazo de Samantha—Dile lo que sabemos.

Sam respiró hondo. —Fue hace veinticinco años cuando todas teníamos 7, ustedes dos eran las más pequeñas tenían 5 creo—comenzó refiriéndose a Kieran.—Jugábamos en halloween —Sam tragó con fuerza comenzando a decirle.

Flashback.

—¡Kieran corre!—gritó Kara divertida tomándole la mano. Kieran sonreía como la niña feliz que era y jugar con Kara era un plus enorme.

Samantha y Maggie las miraron y fueron tras ellas—¡Ajá la traes!—chillaron y salieron correteando entre risas.

—¡Corre Sammy corre!—gritó Alex desde su escondite.—¡Maggie, apúrense!

—Alex no es justo que las ayudes!—chilló Kara.

Kieran sonrió—No te preocupes Kara yo las atraparé para ti—dijo con brillo en los ojos—¿Eso te haría feliz?

—¿En serio Kieran?—La abrazó—Pero no lo hagas sola yo las asusto y tú que corres mucho las atrapas y zassssss—alzó las manos—nuestras.

—Bien—sonrió la pequeña de ojos verdes y ambas se pusieron manos a la obra.

Las niñas corrieron durante mucho rato persiguiéndose—Mira soy una super heroína—gritó Kara cuando atrapó a todos con ayuda de Kieran—mírame Kieran, lo logramos juntas—festejó y le sacó la lengua a las demás.

—No es justo Kara, Kieran es como hacer trampas es muy rápida—dijo Sam haciendo puchero.

—Sam eres mala perdedora—sonrió Maggie.

—Ay ya, ya no quiero jugar más—les dio la espalda.

—¿Y si jugamos al escondite?—preguntó Kieran con timidez.

Kara sonrió —Sí, pero como tu fuiste la de la idea tú cuentas y todas nos escondemos.

Kieran asintió y todas incluida Samantha que no quería jugar, se fueron a esconder. Diez segundos después de comenzar a contar la pelinegra sonrió y comenzó a buscar por todo el enorme jardín de la mansión.

—¿Chicas?—preguntó con miedo al no encontrar a nadie—N-no las veo, ya no me gusta ¿Me dejaron sola?—su voz se hizo temblorosa y baja. Sostuvo la cola de su disfraz de lobita y siguió caminando hasta que un grito la hizo brincar en su sitio.

Al llegar al lugar Kara estaba llorando, habían traspasado el muro de la mansión por un agujero en la pared porque habían pensado que sería divertido que Kieran las buscara y no las encontrara, planeaban regresar pronto, pero Jor-El Danvers el hermano de Eliza las persiguió. 

Estaba borracho y jugaba con su arma, era un depravado y ellas eran un montón de niñas pequeñas y débiles. 

Kara lo había empujado cuando él se les acercó con su arma apuntándoles y lo había lanzado por un barranco. El hombre se había roto el cuello al caer.

Kieran llegó—¿Kara qué pasó?—preguntó temblorosa.

—Mi, mi tío Jor-El él...

Eliza llegó al escuchar el grito y luego los llantos. Kara entonces la miró aterrada.—¿Mamá? 

—¿Kara qué paso?—Eliza se asomó al acantilado para ver a Jor-El muerto abajo, su cabeza estaba completamente torcida en un ángulo de casi 90 grados con su cuello.—¿Kara?¿Qué pasó?

Eliza miró a la niña con furia asesina. 

—Mami yo...

—No me llames mami, dime qué cojones pasó aquí Kara—Eliza estaba completamente destrozada.—No pasa nada Kara—dijo con falsa ternura—Dile a mamá ¿Qué hiciste?