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Capitulo 22

Enojada...

Algo desconcertada, y con un  raro pensamiento que no lograba escapar de mi mente. Un raro sentimiento de serenidad gobernaba mi cuerpo, y miles de pensamientos se adueñaron de manera tortuosa de mi mente. Trato de calmarme, y pensar que hacer. 

Siento después como tocan la puerta, era mi abuela. 

—Cielo, ¿todo bien?—Pronuncia la mayor desde el otro lado de la puerta. 

Guardo silencio, respiro tres veces antes de hablar. Y hablo.

—Si-si-si, abuela... todo en orden—Respondo ante la pregunta que esta hace. 

—¿Segura? acabo de escuchar un ruido algo extraño—Insiste. 

—Abuela, todo esta bien, lo de el ruido es...—Pienso en que decir, pero mi mente se encuentra en blanco. —Había una rata bajo de la cama, y me asuste un poco, ya sabes que me dan mucho miedo.—Solté sin más. 

Silencio.

—Esta bien, te creeré. Pero... ¡duérmete ya! mañana tienes escuela cariño. —

—Si, si abuela. Enseguida me meto a la cama.—Respondo ante su orden. 

No oigo ningún ruido, eso quiere decir que ya se ha ido a su habitación. Me aseguro de que así sea, y con cuidado camino hasta la puerta. Trato de no hacer mucho ruido al abrirla, y miro el pasillo. No, no hay nadie. Así que si. Si fue a dormir. Entro nuevamente en mi habitación, respiro profundo, y trato de ordenar mis pensamientos. Últimamente me han estado pasando un montón de cosas completamente increíbles. 

Me asomo nuevamente a la ventana para ver si la misma persona de hace un rato esta aún ahí, pero... ¡no hay nadie! joder, ¿como es esto posible? hace un par de segundos, o minutos se encontraba ahí, y ahora no hay nadie. 

Mi celular suena nuevamente anunciando un mensaje de texto, lo miro y no me atrevo a encenderlo, ni mirar el mensaje que hay en este. Me armo de valor, doy un bufido, y abro el mensaje. 

Respire profundo al notar que el remitente era Harper. 

Pienso en miles, y miles de cosas antes de contestar el mensaje, ¿debo responder, o no? La duda, la paranoia, y la inquietud se apoderaron de manera cruel de mi. Trato de calmarme, pero nuevamente suena mi celular. Lo alzo con cuidado y con algo de miedo miro la pantalla, era una llamada de Harper. 

—Ho-ho-hola...—Respondo con la voz entre cortada. 

—Riley, ¿Pasa algo?¿que tienes?—Dice ella en tono apresurado. 

Dudo en si decirle o no, no quiero que se alarme. 

—¿Que pasa?, puedes confiar en mi.... ¿lo sabes, no?—Ella insiste. 

Respiro profundo, doy un gran bufido, y le cuento lo que me acaba de pasar. 

—Me han tirado una roca desde la calle, la cual ha roto el vidrio de la ventana.—Digo. 

—Oh por dios, ¿estas bien?—Pregunta esta. 

—...Si, si... solo que...—Mis piernas y manos me tiemblan, trato de pensar con claridad lo que haré, lo que diré, pero no puedo, no puedo pensar con suma claridad. 

—¿Solo que que?—Dice. —¿Paso algo, ¡Dime! y no me mientas por favor, ¿ok?—

—¡Esta bien! recibí una rara nota envuelta en la roca de papel que decía algo sobre la muerta de mis padres, no se que sea, con que motivo, o con que razón, pero estoy malditamente asustada con toda esta mierda, no obstante recibí luego un  mensaje de un remitente igual de desconocido en donde claramente me están diciendo que saben toda la verdad, ¿a que verdad de mierda ser refieren? ¿¡QUE PUEDO SABER YO!?— 

Un gran silencio se apodero de mi habitación, me senté  en mi cama, y luego Harper hablo nuevamente. 

—Debes calmarte, todo... todo estará bien ¿si?—Dice. 

—... ¿Quien puede asegurarme eso?—Respondo ante su comentario.

—No lo sé, pero yo estaré aquí para ayudarte en todo, de igual forma, estaré aquí, para juntas llegar al fondo de todo este mal entendido, ¿vale?

—Debo irme a dormir, ¿vale? es algo tarde,... mañana hay escuela.—Digo. 

—Esta bien, descansa, dulces sueños—Dice ella. 

—....Riley...—Habla Harper antes de colgar la llamada. —Te quiero mucho, no voy a dejar nunca que te sientas mal, todo va a estar bien, y.... aquí estaré para todo lo que necesites, siempre serás así. ¿ok?—Dice. 

Su voz, sonaba algo ronca, quizá tenía algo de alergia. 

—Buenas noches. 

Digo para después colgar el celular. 

Doy un par de suspiros, ladeo dos veces la cabeza, y luego camino hasta ,  la ventana que se encuentra abierta la cierro y después, y recojo cada pedazo de vidrio roto que se encuentra en el suelo, acto seguido, me meto en mi casa, y me acobijo con la sabana, cierro mis ojos, dejo que mi mente fluya un par de segundos, y me quedo profundamente dormida. 

(...)

Correr...

Era todo lo que podíamos  hacer Harper y yo en ese momento. 

Solo correr, correr,... y huir lejos. 

Llueve con mucha intensidad, no sabemos con claridad en donde nos encontramos, solo sabemos bien que debemos escapar, hemos estado corriendo durante dos, tres, o cuatro minutos, y lo que sea que se encuentra persiguiéndome no descansara hasta alcanzarme. 

¡Maldita sea, que es lo que quiere de nosotras! 

A mi lado se encuentra Harper, ella ha estado conmigo desde que empezó todo esto, tratábamos de ser fuerte, pero no podíamos, nuestras piernas nos flaqueaban, nuestros corazones latían fuerte y veloz, y por mi mente no pasaba en ese momento ningún pensamiento de positividad. 

—Vamos, tenemos que continuar—Le digo a Harper al notar que esta se tira en el suelo, y respira profundo un par de veces. 

—No puedo... hemos estado corriendo durante mucho tiempo, sea lo que sea lo que nos persigue no tiene buenas intenciones. 

Su voz, se oía algo roca, entrecortada, y completamente débil por el frío de la media noche, pero... me niego ante la posibilidad de que nos pase algo, así que me dispongo a hablar nuevamente. 

—¡Por eso mismo, debemos huir, ir con la policía, vamos... Harper, debes levantarte...—Digo tratando de hacer que esta cambie de opinión, se levanta, y decidimos continuar con nuestro andar, un fuerte trueno llama nuestra atención por completo, y Harper no puede evitar asustarse ante el fuerte sonido. 

—No tan rápido hermosuras...—Oímos una voz masculina a nuestras espaldas, su voz, se escuchaba algo distorsionada por el frío. Volteamos con sumo cuidado y al verlo, era algo alto, no pudimos ver su rostro porque el mismo se encontraba completamente cubierto con un pazamontañas que le cubría la cara. 

—¿Quien eres, y que es lo que quieres?—Pregunto tratando de mantener la calma y no resultar asustada. 

—Han cometido un gran error chicas...—Habla este. 

—Error, de... ¿de que carajos hablas maldición?—Hablo nuevamente, pero lo que escuchan posteriormente mis oídos me dejan completamente perpleja, solo...solo oír un gran impacto de bala, seguido de ver la sangre de Harper correr por el suelo, siento después una fuerte punzada en la parte posterior de mi torso... 

solo logre ver mi sangre correr...

La Imperfecta Unión de Dos Opuestos©  [En edición] |¡NUEVA VERSIÓN!|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora