Glicinas [Kimetsu no Yaiba x OC]

Capítulo 11

*Inicio del recuerdo*

--- El patrón ya está aquí.

Haruka, quien había abierto las puertas de tatami para avisar a los pilares sobre la llegada del pequeño niño, ahora a cargo de la organización, se hizo a un lado sin retirar su inclinación respetuosa en ese silencio profundo que se generó.

Protocolo aprendido, y expresiones ensayadas.

Las glicinas perfumaban el aire del jardín donde la reunión de los Pilares se llevaba a cabo, y a pesar de la angustia en los hombres convocados, el ambiente que estaba cargado de seriedad y preocupación se volvió tranquilo una vez Kagaya entró al salón.

Con una dulce y gentil sonrisa en su inocente rostro.

--- Lamento hacerlos esperar.

Al instante, todos los pilares presentes se inclinaron en una acción prolija.

Haruka: (entrando al salón, cerró la puerta, y acercándose se sentó atrás de Kagaya, en unos cojines ya preparados para ambos) ~Ahora que estamos aquí, quizás haya problemas con los pilares. Hermanito dijo que él se haría cargo, y que solo estuviera tranquila, pero... ¿Realmente estará bien?~

--- (Urokodaki, el pilar del agua, alzó la voz con calma) Estamos aliviados de saber que usted se encuentra bien junto a su hermana menor, Oyakata-sama.

--- Les deseamos nuestro más profundo sentir ante lo ocurrido con la familia Ubuyashiki (Kuwajima, el pilar del rayo, alzó levemente su mirada con cuidado) Nosotros los pilares, estamos a su disposición.

--- Realmente se los agradezco.

Ubuyashiki Kagaya, a pesar de su juventud y la tragedia que sus propios ojos presenciaron, se encontraba irradiando una calma y determinación que imponían respeto. Todos los hombres, algunos ya avanzados en edad, guardaron silencio al notar esa determinación que con cada generación de Ubuyashiki parecía ser más intensa.

A su lado, la pequeña y serena Haruka, mostraba su calma ante la situación a pesar de su corta edad; mostraba una expresión controlada y madura, probablemente, como consecuencia del ataque a su familia.

El respeto hacia esos dos niños sobrevivientes, fue instantáneo.

--- La razón para convocarlos, fue para presentarme como el siguiente Patrón a cargo de la organización. Mi padre, el anterior Oyakata-sama, ya se encontraba en una etapa avanzada de su maldición, y por ello, me instruyó en mi labor como su sucesor. Se me encomendó la tarea desde mucho antes de guiar a los cazadores en esta batalla que se ha extendido, sin embargo, como el nonagésimo séptimo líder de la Organización, me encargaré de guiarlos con la mayor de las aptitudes.

Para sorpresa de los adultos, ambos niños se inclinaron ante ellos.

--- Esperamos, como familia Ubuyashiki, lograr trabajar con ustedes.

--- (alarmados) ¡Por favor! No es necesario que se inclinen...

--- ¡Oyakata-sama!

--- Nosotros en realidad deberíamos disculparnos (mencionó Shinjuro, el pilar de la flama con aspereza, pero evidente respeto al hablar) La masacre reciente ha demostrado que necesitamos medidas adicionales para proteger de su familia.

--- No podemos permitir que algo así ocurra de nuevo.

Haruka: (al notar como su hermano volvió a erguirse, ella imitó su acción) ~Aun si están preocupados, ninguna de las anteriores generaciones de patrones ha tenido protección. No están del todo mal, pero... no creo que sea necesario~