11. no estamos solos

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Al día siguiente Daryl se estaba preparando para acompañar a los demás a limpiar el resto de la prisión cuando William llego a saludarlo.

—Hey.

—Hola, ¿Qué tal la noche?

Sintió el agradecimiento de William en un abrazo.

—No se que te hizo cambiar de opinión, pero gracias, papá.

—Sabes que no por llamarme papá se va a repetir ¿no?

—Tenia que intentarlo, ¿vas a salir?

—Iremos a la cafetería, e intentaremos llegar a la enfermería también.

—Lo sé, Edward se despertó temprano para ir con Hershell. ¿Necesitan que los respaldemos?

—No lo creo Will, Rick quiere que seamos pocos para que tengamos espacio para movernos entre los pasillos, estaremos bien, creo que Hershell va más que nada para decirnos que puede servir allá adentro.

—Okay, solo ten cuidado ¿sí?

—Sabes que sí, ayuda en lo que puedas aquí.

—Te veo más tarde entonces.

—No hagas nada que yo no haría mientras no estoy, niño.

—¿Cómo vas a saber que hago si no estás?

—¡Hablo en serio!

Vio a Will alejarse con una sonrisa y suspiro.

—Lo mantendré vigilado por ti.

Daryl se giró en cuanto escucho su voz.

—Te lo agradecería.

—Beth aun esta nerviosa, pero me encantaría ir con ustedes.

—Supongo que esta vez no habrá competencia.

—Es una pena, aunque seguro habría vuelto a ganarte, tengo una visión perfecta, seguro vas a extrañarme allá adentro.

—Bueno, con suerte volveremos antes de que tu me extrañes a mí.

—En tus sueños, Dixon.

Daryl soltó una risita.

—Bueno... será mejor que me prepare antes de que se vayan sin mí.

—Oh claro, arquero estrella, no te distraigo más.

Volvió a reír y negó con la cabeza.

—Hey, Dixon.

Daryl se giró mientras se colgaba su ballesta.

—Cuídate, y cuida de papa ¿sí?

—Lo tengo, no te preocupes.

Cuando Daryl se reunió con el grupo, le sorprendió ver a Maggie ahí, Alicia también podría haberlos acompañado si ese era el caso, mas no dijo nada.

Conforme se adentraron en el laberinto de pasillos de la prisión, Rick les entrego linternas, escucharon un ruido extraño y descubrieron que Glenn estaba agitando una lata de aerosol y marcaba el camino de regreso, dado que no podían ver más allá de sus propios pies, le pareció algo inteligente.

Todo el camino había estado tranquilo, y eso comenzó a inquietarlo, se habían cruzado con demasiados caminantes afuera como para que adentro estuviera tan limpio, Daryl iba a la par de Rick, cuando llegaron a una intersección, ambos revisaron un pasillo, en ningún momento se separaron, sabían que no tendría caso, justo como hasta ese momento, permanecían como una unidad, juntos.

Esa ansiedad se volvió tangible cuando iban a girar en un pasillo y antes de escuchar los lamentos, vieron la cantidad de caminantes frente a ellos.

Por las linternas y sus pasos, fueron vistos, rápidamente retrocedieron y Rick le grito a Glenn para buscar las flechas que había marcado una ruta de regreso.

En un parpadeo, se vieron rodeados, pasillos por los que habían pasado se comenzaron a llenar de caminantes, Daryl choco con los cuerpos de los demás y de pronto Rick los metió a todos en un pasillo, donde había una puerta escondida.

—¿Dónde están Glenn y Maggie?

Daryl no se preocupó demasiado, esos dos eran imparables juntos, pero debían esperar a que los caminantes se dispersaran para volver a agruparse. Cuando escucharon que los quejidos se alejaban no perdieron tiempo y salieron.

En susurros, llamaron a Glenn y a Maggie, el se fue con Rick, Hershell estaba detrás, escuchaba sus pasos, acababan de pasar un pasillo cuando escucharon el llamado de Maggie un poco mas adelante, no se dio cuenta de que Hershell también había escuchado a su hija y había entrado en un pasillo por su cuenta para buscarla.

Hasta que lo escucho gritar.

Todos corrieron a donde lo habían escuchado, un caminante estaba masticando la carne de su pantorrilla cuando él le disparo una flecha, Rick grito detrás de él, Maggie y Glenn llegaron por delante y Maggie cubrió su boca mientras su padre seguía gritando de dolor.

Entre Daryl y Rick cargaron el cuerpo de Hershell, Glenn encontró la cafetería al fin y todos entraron.

—La puerta, rápido, hay que cerrarla.

Daryl se puso en medio de ambas puertas tratando de detener a los muertos que empujaban, pero no lo lograría solo.

—¡Glenn! Dame una mano aquí.

Mientras Glenn lo ayudaba a sostener la puerta, Daryl uso uno de los seguros que Rick le había dado para las puertas y la aseguro, se reunieron con los demás un instante después, Maggie sostenía la cabeza de su padre mientras el comenzaba a perder el conocimiento, había muchísima sangre, no le quedaba mucho tiempo.

—Solo hay una forma de salvarlo.

Rick se quito su cinturón, y Daryl al instante comprendió lo que estaba a punto de pasar, miro a Glenn que se encontraba junto a Maggie y le hizo una mueca mientras él se ponía del lado contrario.

—Sujétalo.

Rick y el compartieron una mirada, Daryl asintió, entonces Rick tomo el hacha que guardaba y tomo un impulso para acertar en la pierna de Hershell.

El sonido de la carne siendo cortada se repitió una y otra y otra vez, Daryl se concentró en sujetar al hombre y no pensar en que quizá tendría que decirle a Alicia y a Edward que habían perdido a su padre.

No lo iba a permitir.

Cuando Rick finalmente termino, Daryl le dio una mirada a la extremidad, ni siquiera estaban seguros si habían actuado a tiempo, si funcionaria.

Hershell se había desmayado.

—Tenemos que regresar, se está desangrando.

Daryl capto movimiento a lo lejos, tomo su linterna y les susurro a todos antes de levantar su arma.

—Abajo.

No estaban solos.

SAVED BY A STRANGERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora