Evan Peters One Shots +18

Kit Walker +18

Bosque

Giraba a mirar a mis costados por cualquier ruido extraño, no sé porqué había aceptado la idea de Kit sobre hacer una caminata temprana en el bosque, ya que esté lucía espeluznante.

- ¿Cuánto falta? - pregunté acercándome a él

- ¿Para qué? - preguntó divertido

- Para llegar a dónde estamos yendo. - dije de forma obvia

- No estamos yendo a ningún lado enrealidad. - lo miré de forma sería y rió - Oye, disfrutemos está paz.

- A mí ya me da miedo. - dije y él apretó mí hombro

- ¿Quieres que te lo saque? - preguntó y lo miré frunciendo el ceño - El otro día quedamos en medio de algo.

- Kit.. - susurré al sentirlo cerca a mis espaldas - No quiero que nuestra amistad se vaya al diablo por esto.

- Ninguno va a involucrar sentimientos, es solo diversión. - susurró en mí oído comenzando a dejar besos en mí cuello - Déjate llevar.

Cerré mis ojos ante la humedad en mí piel, podía sentir sus dientes morderme y sus manos acariciar mis costados.
Me giró buscando mis labios y nos besamos como si lo hubiéramos estado esperando hace mucho.

Su cuerpo empujó al mío contra un árbol cercano y nuestras respiraciones se aceleraron a medida que el beso subia de tono.
Mis manos tiraron de su cabello y apretaron su cuello, las suyas acariciaron mis piernas subiendo una a su cintura.

- Desde hoy esta es mí falda favorita. - murmuró llevando su mano debajo de ella

Apretó mí trasero mientras mí boca succionó su cuello el cual rápidamente se marcó, su piel era tan blanca y sensible. No podía esperar a dejar rasguños en su espalda.

Hizo mis bragas a un costado para acariciar mis pliegues y mover sus dedos en mí interior.

- Estás muy mojada y apretada. - mordió mí labio inferior - ¿Te excito?

Susurré un desesperado Sí mientras mí cabeza se apoyaba en aquel húmedo árbol.

- Kit, te necesito. - supliqué tirando de su cuerpo, mis manos buscaron su bragueta

Acaricié su bulto por encima de la ropa provocando pequeños sonidos guturales de su parte, su voz era algo delirante, capaz de humedecer a cualquier mujer.

La ropa se hizo a un lado para poder sentirnos y llevó su miembro a mí interior lentamente.
Aún seguíamos en la misma posición, podía ver cada mueca de su rostro, su ceño fruncido y sus ojos puestos en el lugar donde nos unimos.

Sentía la necesidad de tenerlo aún más cerca de mí, tanto que me volvía loca.

Me giró dándole la espalda y su pene se deslizó de arriba hacia abajo en mis pliegues.

- Dí cuánto me quieres dentro de ti. - dijo en mí oído, su voz se había vuelto aún más aguda y hasta podía sentir algo de desesperación en su tono

- Por favor, quiero que estés dentro de mí Kit. - supliqué nuevamente removiendome ante las cosquillas que su respiración provocaba en mí oído

Me penetró con fuerza y vehemencia, sus caderas chocaron mis glúteos con fuerza y entendí porqué nos habíamos adentrado tanto en el bosque, ya que estábamos haciendo mucho ruido.

Podía sentir la humedad deslizarse entre mis piernas y sus testículos chocar contra mí centro haciéndome gemir.

- ¿Más duro? - preguntó apretando mis caderas, asentí entre murmullos y quejidos - Dilo, pídelo.

- Dame más duro, Kit. - pedí cerrando mis ojos, mis piernas comenzaban a temblar

La humedad creció aún más y podía oír los jugos entrar y salir de mí. Volvió a girarme está vez tomándome entre sus brazos, rodeé su cintura con mis piernas y me penetró nuevamente apoyándome contra el viejo árbol.

Me embistió duro, le costaba mantener sus ojos abiertos al igual que yo y podía sentir los latidos de su miembro en mí interior.

- Voy a correrme. - susurró antes de salir de mí y terminar acariciando su miembro hasta derramarse en mí estómago