Evan Peters One Shots +18

Peter Maximoff +18

Pequeño Secreto

Guarde los libros que se encontraban sobre mí escritorio y respondí el último mensaje de mí novio antes de tirarme sobre mí cama, pero pronto la voz de mí padre me hizo resoplar.

- Tn, baja por favor. - dijo seguramente desde las escaleras

Cuando entre a la sala lo ví, mí tío favorito. Él no era de la familia, para mí suerte, ya que Peter Maximoff me parecía el hombre más atractivo que había pisado la tierra.

- Cielo, Peter se quedará contigo esta noche, nosotros debemos ir a una reunión. - dijo mí madre luego de servirle agua en un vaso

- Al parecer será noche de películas. - me sonrió mí padre tocando mí hombro antes de pasar por mí lado

Peter me sonrió con los brazos estirados en el sofá, le encantaban las noches de películas.
Las cuales nunca veiamos.

Cuando mis progenitores salieron de casa, puse palomitas de maíz dentro del microondas. Peter paso por mí lado y sacó dos latas de refresco del refrigerador.

- ¿Que es lo que te mantiene tan callada? - sonrió a mí lado

- Pensé que era muy chillona. - dije usando sus palabras, siempre me lo decía

- A veces es agradable oírte chillar. - contestó abriendo una de las latas y alcé mí ceja - ¿Algún problema?

- Contigo, tengo muchos. - saqué las palomitas y las puse en un bowl antes de dirigirme hacía la sala

- Te los buscas. - se encogió de hombros

- ¿Yo? ¿Cómo así? - reí hacía él

- Sabes bien de lo que hablo. - suspiró y subió sus pies a la mesita ratona

Abrí mis ojos despacio para verme rodeada de oscuridad, pero no estaba sobre ninguna superficie, si no que en un par de brazos, pude sentir que subía las escaleras. Me removí un poco y aseguró su agarre.

- Te quedaste dormida a mitad de la película. - habló bajo

- ¿La terminaste? - pregunté en un bostezo

- No era un buen final. - lo sentí encojerse de hombros, no podía verlo bien debido a la oscuridad

- ¿Qué hora es? - murmuré

- Ya es tarde. - abrió la puerta de mí habitación

Me dejó sobre la cama y cuando estaba por irse lo tomé del brazo.

- ¿Puedes quedarte? - pregunté esperando con ansias

- Solo un rato. - murmuró sentándose a mí lado

Me moví hasta apoyar mí cabeza en su pecho y jugó con mí cabello. Podía oír su corazón golpeando lento pero fuerte. Me pregunto que piensa.

- No.. - susurró arrastrando mí mano lejos de su abdomen - Sabes que está mal.

- Ya no soy una niña Peter. - dije sentándome frente a él

Su entrecejo estaba fruncido y su mandíbula marcada, humedeció sus labios y noté lo brillante que se veía su cabello, era un dios.

- Si alguien se enterara estaríamos en muchos problemas, sobre todo yo. - negó y cuando me acerque giró su rostro

- Peter. - susurré sobre su mejilla - No puedo fingir que no quiero besarte.

- No.. no podré detenerme. - esquivó mis labios pero tomé su rostro

- No quiero que te detengas. - susurré antes de besarlo

Sus labios suaves chupaban los míos mientras sus manos me tomaban del rostro al igual que las mías, mordió mí labio inferior provocandome un suspiro y tiré de él para que se acostara a mí lado.

Su lengua sabía dulce, jugaba con la mía en el interior de mí boca y al salir absorbía mí labio inferior, lo sentí apretar mis caderas y me giré dándole la espalda, me abrazó por la cintura besando mí cuello y mí celular vibro.

- Creo que tú novio te busca, princesa. - susurró en mí oído

Apagué el móvil y lo dejé sobre la mesita de noche.
Sus brazos me rodearon pegando mí espalda a su pecho y continúo besando mí cuello, mientras que mí mano desordenaba su cabello.
Pude sentir sus caderas pegarse a mí trasero y lo "contento" que se había puesto, suspiré ruidosamente y apretó uno de mis pechos.

La ropa termino siendo un estorbo que fue quitado de en medio y cuando estábamos desnudos dirigió su mano a mí entrepierna, acarició mí manojo de nervios que ya punzaba de placer y pegó sus caderas aún más a mí.
Sus dedos acariciaron antes de hundirse en mí interior e hicieron movimientos que me provocaba querer tenerlo dentro de mí.

Se subió encima de mí dejando de tocarme para bajar sus labios de mí cuello hacía mis pechos y morder mis pezones, su lengua se deslizó hacia mí vientre y aún más.

- Peter.. - traté de hablarle cuando sentí su boca en mí húmedo coño

Quise cerrar mis piernas las cuales abrió con sus grandes manos y arquee mí espalda sintiendo sus labios chupar mí clítoris y con su lengua recorrerme toda.

- Mírame a los ojos. - murmuró sin separarse de mí

La vista era encantadora, cegadora, sin dudas su cabello lucía mejor despeinado y su cabeza entre mis piernas, comiéndome, saboreandome.

- Dime qué te gusta. - mordió el interior de mis muslos - O me detendré.

- Me encanta Peter.. - hablé en un hilo de voz, lucía agitada casi ansiosa por más - Por favor sigue.

- Buena chica. - susurró guiñandome un ojo antes de volver a jugar con su lengua

Mis gemidos aumentaron al sentir sus dedos en mí interior, su otra mano me acariciaba y buscaba agarrar mí rostro para que no deje de observarlo, hasta llevarme a mí límite.

Lamió hasta la última gota que chorreaba de mí interior.

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¿Esperan segunda parte?

Gracias por votar, leer y comentar. Les cuento que me encanta leerlas y me divierte cada cosa que ponen, por favor sigan siendo así!

Trataré de estar actualizando seguido ya que la semana que sigue voy a festejar mí cumpleaños así que me tomaré un par de días.

Así que aprovechen para darme ideas, espero poder dejarles varios imaginas.

Nos vemos pronto!