Evan Peters One Shots +18

Peter Maximoff +18 pt 2

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Nuevamente lo sentí colocarse detrás de mí y suspiré nerviosa al sentir sus dedos recorrer los costados de mis caderas.
Aúnque no era la primera vez, el platinado tenía este efecto en mí, me ponía cada vello de punta con tan solo respirar cerca de mí.

Sin dudas respirar el mismo aire que Peter Maximoff era tener un privilegio.
Pero estar debajo de él, es otro nivel.

- Seré cuidadoso. - susurró moviendo el cabello que caía por mí oreja

- No por mucho tiempo. - sonreí al sentir sus mordiscos en mí hombro

- Ya me conoces.

Una punzada se hizo paso en mí intimidad cuando comenzó a penetrarme, al principio dolía, lo hacía siempre hasta que lograba acostumbrarme.

Una vez que su miembro estuvo completamente dentro de mí, tomó mí muslo desde abajo y levanto ligeramente una de mís piernas, separándolas.

- Te sientes tan húmeda y apretada. - balbuceó a mis espaldas

Su mano libre me rodeaba por debajo de mí cuerpo acariciando mis pechos, su ritmo comenzaba a aumentar y la sensación de placer me provocaba ganas de lloriquear entre gemidos, me sentía explotar.

- Quisiera follarte por todos los rincones de esta casa. - deslizó su lengua por mí cuello - Poder sentir como te retuerces cada vez que la meto toda y gimes mí nombre.

- Oh dios. - susurré cuando me giró dejándome boca abajo

Tomó mí cintura con ambas manos y tiró de mí hasta dejarme apoyada en mis rodillas y completamente expuesta hacía él.
Giré mí cabeza para verlo mientras se acariciaba mordiendo su labio inferior, me sonrió de lado guiñandome un ojo y eso bastó para sentirme desesperada por él.

- Peter te quiero dentro de mí. - supliqué desconociendo mí propia voz tan ansiosa

- Haré lo que tú me pidas. - dijo antes de embestirme sin piedad

Gemí en alto, tomé las sábanas entre mis manos y sentí las suyas colocarse sobre mis glúteos, apretándolos y hasta golpeandolos a gusto.
Pude oírlo gemir y la sensación de saciedad, al punto del clímax se apoderó de mí. Me sostuve de sus muslos y me permití lloriquear, temblar, suplicar en lo que mí orgasmo me consumía.

- Cielos.. voy a acabar.. - dijo en un murmullo mientras se inclinaba sobre mí

Mordió mí espalda haciéndome arquearla y tiró de mí cabello antes de salir de mí interior, luego pude sentir el líquido caliente caer sobre mí.

- No te muevas, buscaré algo para limpiarte. - besó mí mejilla antes de dirigirse al baño

Al volver limpió el desastre en mí parte trasera y luego volvió a su lugar, donde acarició mí rostro con una sonrisa ladina.

Sin dudas lo que necesitaba era a alguien mayor, alguien como Peter.