Evan Peters One Shots +18

Alex + Tate +18

Los gemelos

Me encontraba saliendo con un chico de la preparatoria, uno con muy mala fama. Tate.

Se lo conoce por su mala conducta y por ser la "oveja negra" de su familia, tiene un hermano gemelo el cual parece ser completamente diferente.

Pero había un rumor, en el vestidor de mujeres pude escuchar que les gustaba hacer cosas juntos, se entiende que tipo de cosas, y que ambos eran muy buenos.
A decir verdad, ya lo había hecho con Tate, pero no sabía sobre lo que decían sobre ellos, y ahora me daba un poco de curiosidad.

Así que una noche que sus padres salieron, me dispuse a saber si esto era cierto.

- Que aburrido miércoles. - bufo Alex abriendo una lata de Coca-Cola

- ¿No tienes ningún lado donde ir? - pregunté curiosa

- ¿Me estás hechando? - dijo luego de sonreír

- Claro que no, es que teníamos planeado ver una película.. - me miró a los ojos y pude sentir un cosquilleo similar al que sucede cuando veo a Tate - Y si quieres te puede unir.

- ¿Noche de tres? - preguntó sin doble sentido - Suena divertido, deberías preguntarle a Tate si no le molesta.

- ¿Que me molesta? - preguntó el rubio entrando a la cocina en busca de algo en el refrigerador

- Que me una a ustedes está noche. - contestó su hermano y el lo miró de forma extraña - A la película.

- Oh claro que no. - se encogió de hombros y ambos se giraron a verme, pero Tate le dio una corta mirada al castaño

- Iré a escogerla. - señalé hacía la sala

- Es mí novia. - dijo el rubio al verme desaparecer del lugar

- Yo no dije nada. - refutó Alex antes de que pudiera dejar de oírlos

La película ya casi estaba por acabar, los nervios no me habían dejado concentrar a pesar de que se trataba de una de terror. Tate se había quedado dormido a mí lado con su cabeza en mis piernas y las suyas colgando de un lado del sillón.
Alex permanecía mirando la televisión en el sofá individual hasta que un ronquido de Tate lo distrajo.

- Tapale la nariz. - me dijo y negué

- No haré eso, se ahogara.

- Eso es lo divertido. - dijo de forma obvia

Se levantó de su lugar y se sentó junto a mí para poder hacer su travesura, pero lo detuve tomándolo de la muñeca.

- Alex no, se despertará de mal humor. - bufé

Río y siguió viendo la película, luego de un rato se acomodó y extendió un brazo sobre mis hombros, lo cual me puso aún más nerviosa pero fingí no darle importancia.
Hasta que lo sentí juntarse más a mí, jugando con un mechón de mí cabello cercano a su mano.

- ¿Te molesta? - preguntó mirándome y negué sin devolverle la mirada - Te noto tensa.

- Estás muy cerca. - murmuré

- No parece molestarte. - hablo bajo y ronco

Su mano libre se dirigió a mis piernas cerca del dobladillo de mí falda lo cual me hizo sobresaltar un poco y que Tate se despertara.

Alex solo quitó su mano pero no la que llevaba en mí hombro, el rubio a mí lado se estiró en un bostezo y se giró a vernos.
Lo miré de reojo y pude ver qué noto la mano del castaño jugando con mí pelo, giré hacia el y lo vi sonriendo hacía su hermano, luego me observo guiñando un ojo, volví la vista hacia mí novio pero una mano me detuvo y pronto sentí unos labios sobre los míos.

Me sobresalte ligeramente y por instinto me acerque más a Tate, este me sujeto y se acercó a mí oído.

- ¿No es lo que querías? - preguntó plantando un beso en mí hombro

No volví a resistirme a la situación, mucho menos cuando terminamos en la habitación del castaño, yo en frente de ambos sobre mis rodillas y con poca ropa. Ellos aún con sus prendas de abajo, mirándome expectantes.

Baje el pantalón de ambos y pude notar que sus penes eran diferentes, pero del mismo tamaño.
Los acaricié a la par y primero lleve a mí boca el de Tate, quien tomó de mí cabello y movió sus caderas hacia mí.
Luego probé el de Alex quien busco que lo mirara fijamente a los ojos.

Me colocaron sobre la cama, con mis piernas abiertas, el rubio bajo a mí húmeda vagina para darle atención mientras que el castaño besó mis labios, mis pechos y marcó mí cuello.

Alex me guió sobre él y lo ayude a penetrarme, lo hizo lentamente hasta quedar completamente en mí interior, tiro de mis brazos hasta pegar nuestros pechos y pude sentir a mí novio colocarse detrás de mí.

- Tal vez te duela un poco, amor. - dijo acariciando mí espalda

- ¿Es tu primera vez por allí? - preguntó Alex y asentí - Carajo ya quiero probarte.

- Sigue siendo mí novia. - recordó Tate untando lubricante en ambos

- No soy celoso, puedes ser la de ambos. - me sonrió

- Lo hablaremos más tarde. - sugerí

Sentí una nalgada por parte de Tate quien me miró con una ceja alzada.

- Oye, ella decide. - le dijo su hermano

- Lo siento si te duele cariño, pero no voy a parar.

Gemí en cuanto sentí su glande hincar en mí, y una pequeña punzada de dolor.

Alex me distrajo metiendo su mano entre ambos para acariciar mí clítoris y el dolor de a poco cesó.

Los tenía a ambos moviéndose en mí interior, se sentía tan placentero y era imposible callar mis gemidos, Tate apretaba mis glúteos con fuerza cada que me penetraba, Alex mordía y succionaba mís pezones.

Cambiamos de lugar y ahora mí novio estaba frente a mí, sentado gimiendo mientras chupaba su pene.
El castaño se encontraba detrás de mí follandome hasta el fondo mientras metía sus dedos en mí vagina.

- Oh mierda.. voy a correrme. - murmuró Tate al sentir como mis gemidos hacían vibrar su glande en mí garganta

- Carajo, yo igual. - susurró un agitado Alex

Ambos se pararon frente a mí masturbándose y diciendo groserías hasta acabar en mí cara.

Luego de que me ayudarán a limpiarme, nos sentamos en la cama.

- Yo doy mejores regalos de aniversario. - sugirió Alex haciéndonos reír

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Está no se la esperaban
¿O si?

Díganme si quieren más capítulos así.

Gracias por leer!