LOVE STORY. Pedri González♡

19. Campeones.

19| Campeones.

Dana.

Me encontraba sentada en la cama con el portátil en mí regazo, tratando de escribir un capítulo de mí historia. Estaba algo inspirada para escribir, ya que hace tiempo no tenía tiempo para hacerlo por la universidad y otras cosas.

— ¿Qué haces?. — pregunta Pedro una vez que de metió a la cama, dejándome un beso en en el hombro.

Volteo para verlo, tenía el cabello húmedo y eso hace que se le desordene un poco, inconscientemente, llevo mí mano para acomodarle. Sonríe y apoya su cabeza en mí hombro, mirando lo que estaba escribiendo.

— Tratando de terminar el capítulo, ya me falta poco. — respondo.

— ¿Es el de la chica que hace pasteles y el chico famoso?.

— No, ese ya lo he terminado. — niego sorprendida. — ¿Cómo sabes de ese libro? Nunca te he enseñado ninguno.

— Me lo he leído por la aplicación donde las subes, aún que no termine de leer. — se escoge de hombros, restándole importancia, metiéndose bajo las sábanas.

— ¿Has leído mis libros?. — pregunto aun sin poder creerlo.

— Claro. — sonríe al ver mí cara. — Me he leído todos los que tienes, solo me falta terminar de leer el de la chica que hace pasteles.

Me agarra la mano para que yo también me meta bajo las sábanas, lo cual, apagó el portátil, dejándolo en la mesita de noche junto a mis gafas para acurrucarme junto a él. Nos quedamos en silencio unos minutos, jugando con nuestras manos — como solíamos hacerlo siempre — hasta que yo hable por recordar algo.

— ¿No ibas a la piscina con los chicos?.

Esta tarde han quedado en ir todos juntos a la piscina antes del partido de la Supercopa de España que sería mañana por la noche.

— Nah, quería pasar tiempo con mí novia.

Me tenso ligeramente, levantó mí mentón para verlo a los ojos y comprobar que no está jugando. Efectivamente no lo estaba haciendo, no estaba jugando.

— ¿Tu novia?.

— Si, ¿eso es lo que eres no?.

Asiento con la cabeza y él sonrie. Yo también lo hago, tanto que siento que mis mejillas explotarán. Seguramente estaba como un tomate. Me sentía una nena de catorce años de nuevo.

—Si..., y tu eres mí novio. — hablo un tanto emocionada. Él suelta una carcajada y con una de sus manos agarra mis mejillas rojas para poder dejarme un pequeño beso en la boca.

Nos separamos lo suficiente para poder contemplarnos unos pequeños segundos, su sonrisa era tan grande que sus brillosos ojos marrones se hacían chinitos, parecía contento, yo lo estaba. Levanta su mano para colocar mí mechón rebelde detrás de la oreja.

— No tuve tiempo de preguntarte pero, ¿Cómo llevas que hablan de ti en internet?. — inquiere. — Se que no estás acostumbrada a este tipo de cosas, puede que te agobies por eso.

Suspiro levemente.

— No le estoy dando tanta importancia, por ahora. — apoyo mí cabeza en su pecho. — Sabes que no soy mucho de usar redes sociales, solo la cuenta pública que tengo para mis libros. — sonrió divertida — Mis lectoras se sorprendieron por saber que conozco a un futbolista famoso.

— Me deja tranquilo saber que no te afecta tanto. — me deja un beso en la coronilla. — Normal que se sorprendan, con lo guapo que soy.

— ¿Quién te ha mentido, Pepi?.