Capítulo 34

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Orhan se encontraba en el camarote cuestionando que pecado había hecho para que Hürrem terminará en su provincia con Hatice, aunque quería a su hermanita sabía que la joven tenía una tendencia a causar problemas por lo consentida que se encontraba a causa de su padre, de todas sus hermanas Hatice desde que tenía memoria y llegó a este cuerpo siempre lograba salirse con las suyas con absolutamente todo, solamente tenía que dar una mirada llena de lágrimas, así como un pequeño puchero y obtenía cualquier cosa que quisiera, e incluso con eso lograba evitar castigos, para disgusto de cualquiera de sus hermanas y más aún de su melliza.

Entonces ya podía imaginar lo disgustada que se encontraba Sah al tener a su hermana en el castillo, queriendo hacer su voluntad respecto a todo, pero ese no era el principal problema que tendría en sus manos al llegar él a la provincia, sino que lo más probable era que la intención de mandar a Hürrem a la provincia era el que la joven formará parte de su harén, lo que ciertamente le causaría conflicto pues aunque la joven podía admitir era bonita, no tenía una relación buena con Mahidevran lo que llevo a la muerte de los hijos de ambas mujeres.

Algo que desde su perspectiva era algo intolerable, él no permitiría que ninguno de sus hijos tuviese que enfrentarse a la realidad que el tenía que sobrevivir con Suleyman, no dejaría que sus pequeños se vieran como algo más que hermanos cuando fueran mayores, se encargaría de inculcarles los valores debidos para lograr su bienestar y el de su pueblo. Pues sabía que aunque no quisiera la única forma de sobrevivir después la muerte de su padre era matando a Suleyman ya después se encargaria de lograr un equilibrio en el poder respecto a la sucesión.

Pero tan solo pensar en aquella situación a la que debería enfrentarse sentía su cabeza palpitar, pues a parte de los problemas que tenía en estos momentos para poder lograr la armonía en su provincia así como un equilibrio en la economía, ahora tenía en sus manos una lucha en su harén apoyada por su madre y hermanas.

No es que fuese a aceptar sin más a Hürrem, solamente esperaba que su padre no se hubiese visto involucrado en los planes de su madre y le ordenase aceptar a la joven pues así para su desgracia no podría hacer nada para ir en contra de las órdenes de su padre si es que no quería recibir algún castigo. Para así poder hacer algo respecto a la pelirroja, ya no le sorprendió tanto el hecho de verse involucrado con ella pues parecía que su presencia había cambiado bastantes sucesos. Bueno o malo aún estaba por verse, aquí la cuestión era que por lo que sabía de Hürrem no era del todo fácil de tratar, pero hasta cierto punto podía entender sus posibles actitudes ahorita porque aún era joven. Pero eso no le quitaba el hecho de que le causaría conflictos con Mahidevran y lo que menos quería en estos momentos que se encontraba embarazada era disgustarla por tener una relación con Hürrem.

Ya hablaría con su madre sobre sus intenciones respecto a la pelirroja, porque aunque pudiese entender un poco su forma de intervenir, no estaba a favor de sus acciones, ya que de cierta manera lo estaba menospreciado igual que las demás pashas y beys que lo creían menos que Suleyman. Podía aceptar aquello de hombres con una mentalidad en la que solo importaban los logros en el campo de batalla, pero que su propia madre dudará de sus capacidades debía admitir que si le dolía.

Pensar que había evitado con eficiencia estar en contacto con la jóven para que tuviera su romance épico con Suleyman para que a final de cuentas su madre no considerará sus pensamientos y los sentimientos de Mahidevran mandando a Hürrem a su palacio, realmente desde que leyó el mensaje de Sah se sintió en bastante conflicto pues no sabía exactamente como proceder en este aspecto, pues creyó que tendría más tiempo ante de verse presionado para tener intimidad con otra mujer y más después de haber hablado con su esposa respecto a tomar a alguna concubina, ahora tendría que asegurarse de darle seguridad a Mahidevran respecto a cualquier situación a la que se viese obligado por causa de su madre. Cómo odiaba estos aspectos de esta sociedad aún cuando era considerado un hombre para ir a la batalla y tener intimidad era considerado iluso ante las relaciones.

El sultán protector (HürremxMahidevranxOrhan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora