El sultán protector (HürremxMahidevranxOrhan)

Capítulo 39

Al salir de la habitación de su padre se encontró con quien menos deseaba ver, su futura esposa.

Alexandra, con una sonrisa encantadora, se acercó a Orhan haciendo una reverencia. Y olvidando todos los protocolos enseñados por la madre sultán dijo "Príncipe Orhan, es un placer verle nuevamente y estar cerca de usted. ¿Cómo se siente acerca de nuestras próximas nupcias?"

Orhan, con la mirada perdida en la distancia, respondió con cortesía e indiferencia: "Señorita Alexandra que sorpresa verla aquí en el ala del gran sultán. No esperaba que fuese llamada ante mi padre".

Luego de eso la mujer se puso un tanto roja.

"En cuanto a nuestras futuras nupcias no las he considerado. Mi mente está ocupada por asuntos más complejos en estos momentos."

Ella trató de mantener el tono ligero tratando de no mostrar la vergüenza que sentía por tal respuesta. "Comprendo, después de todo como príncipe tiene grandes responsabilidades, pero creo que podríamos hacer de esto una unión beneficiosa para ambos alteza."

Orhan, con sinceridad, le dijo: "Mis decisiones no son solo mías. Estoy atado por la voluntad del sultán. Sin embargo, trataré de hacer lo mejor para el futuro."

La expresión de Alexandra cambió sutilmente, y con un toque de desafío en su voz, añadió: "No me subestime, príncipe. Puedo ser una aliada valiosa, si decide aceptar mi propuesta."

Ante las palabras desafiantes de la joven pelirroja, Orhan, en un sorprendente giro, soltó una carcajada resonante que llenó el lugar "Alexandra, eres una mujer intrigante. Tu determinación es admirable, pero la política del harem y las decisiones del sultán son más complejas de lo que siquiera imaginas."

La risa de Orhan, una mezcla de ironía y liberación, desconcertó a Alexandra por un momento. "¿Encuentra divertida la propuesta que le hice príncipe?" preguntó ella, con cierto tono herido.

Orhan, con una sonrisa más tranquila, respondió: "No es la situación lo que me hace reír, sino la imprevisibilidad de la vida en el palacio. En medio del caos que es todo esto, me encuentro que tú propuesta es realmente desconcertante."

La joven noto que en la cara de Orhan se reflejaba una mezcla de astucia, mientras consideraba la posibilidad de encontrar en ella una aliada pues él sabía que la joven era pupila de su madre y probablemente lo que deseaba era tener un control más férreo en él y Mahidevran.

Alexandra, a pesar de su sorpresa inicial, mantuvo una expresión cuidadosamente neutral. Consciente de la intriga que envolvía sus interacciones, asintió con cautela, reconociendo que este juego apenas estaba en sus primeras jugadas, y que cada movimiento debía ser calculado en este escenario palaciego lleno de ambiciones y secretos.

Orhan, con una mirada perspicaz, rompió la tensión. "Alexandra, sé que mi madre tiene sus propios planes. ¿Crees en realidad que podríamos encontrar un terreno común para beneficiarnos mutuamente dentro de este complicado ajedrez del poder?"

La joven, evaluando sus palabras con rapidez, respondió con una sonrisa sutil. "Príncipe Orhan, parece que estamos destinados a comprendernos en medio de este enigma. Le aseguro que si colaboramos en mi tendrá a la más fiel de las mujeres."

A lo que Orhan respondió "Interesante propuesta, pero yo ya tengo a mi lado a la más fiel de las mujeres".

La sutil sonrisa en los labios de Alexandra no se desvaneció ante la respuesta del hombre. "Príncipe Orhan, la fidelidad es un tesoro raro en este palacio. Tal vez, con el tiempo, descubras que tener dos aliadas leales podría ser más beneficioso de lo que imaginas."

Orhan, con una mirada enigmática, añadió, "Veremos cómo se desarrollan los acontecimientos. La lealtad es un bien preciado que no tomo a la ligera y usted no me ha demostrado que puedo confiar en sus palabras, mucho menos en sus acciones."