"JungKook naufragó en el olvido hasta que sus fragmentos dispersos se adhirieron a su ser amado, TaeHyung, con quien viviría la plenitud de la existencia y la condena de la pérdida"
Un trauma desencadena una respuesta emocional intensa, que en ocasi...
Tantas son las cuestiones que resuenan y desgarran la poca cordura que lo sostiene a la vida.
―¿Dónde está? Por favor, él debe estar asustado ―expresó totalmente desesperado y luchando contra el adormecimiento de su cuerpo.
¿Qué le habían hecho? ¿Por qué está en una habitación impoluta que recuerda haber conocido en el pasado? La falta de respuesta a sus sucesivas preguntas solo consiguen alterarlo.
―¿Quieres conocer la verdad o continuar en el delirio de tu mente?―cuestionó el profesional, recordando la primera vez que lo conoció y lo que pudo apreciar como el mayor delirio al que la mente puede sucumbir.
El colapso finalmente llegó, una mente colisionó con el pasado que olvidó y que ahora se esfuerza por aprehender entre gritos delirantes de piedad.
―Debería estar aquí a mi lado, él nunca me abandonaría, esa es la única verdad que obtendrán de mí ―es devoto a las promesas que ambos juraron en medio de una noche de tormenta.
―Él no está aquí, porque... ―fue interrumpido por el alarido desgarrador del azabache que trataba de ponerse en pie, aun cuando la debilidad lo hizo caer de rodillas.
―¡Cállate! No te permito que sigas hablando así de él ―continuaría luchando con la fuerza precaria que le queda.
Fue la única promesa que no logró cumplir, una que ante la inexistencia fue precedida por la muerte.
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