¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los de caballera distinta tarareaban una canción por seguidos minutos; por lo menos las veces que podían verles fijamente y cantarles sin que estos se dieran cuenta.
Mināru y Kakashi estaban preparando una carpa de dormir, en la cual todos dormirían juntos, pero, uno en su propio futón.
Ni Sakura, ni siquiera Naruto pudo saber u adivinar cómo lograron hacer que Sasuke cantase. Un canción estilo emo era más probable, pero una de ¿amor? Es que parecía que habían cambiado a su chico de cabello negro, ese que refunfuñaba por todo lo que tuviera vida.
—♪Nuestro amor sabe a chocolate
—, ¡un corazón de bombón que late' ttebayo!
—, nuestro amor sabe a chocolate, oh oh oh oh oh♪
Sin querer el Uchiha entonó como un cantante, dejándose llevar por la emoción. Rápidamente carraspeó, sonrojándose levemente —Que horrible canción. Tks ni siquiera sé por qué la he cantado, dobe.
—¡Baka, es porque te ha gustado! ¡Se sincero, Sasuke!
—¡Naruto!— él le gritó de vuelta.
—¡¡Sasuke!!
—¡¡¡Naruto!!!
La rubia que anteriormente estaba ocupada, ahora se acercaba, llevando inevitablemente los gritos de sus amigos hasta su delicado tímpano —¡Ya, guarden silencio! ¿Es qué acaso no pueden estar un día sin matarse mutuamente?
—Pff claro que puedo... ¡pero no quiero!— Uchiha bramó sin gana.
—Bah, típico de Sasuke... ¡niño tonto con cara de bebé!— Uzumaki quiso golpear al nombrado, abalanzándose contra él.
—¡Mira quién lo dice, el idiota con cara de idiota!— aprovechando la instancia golpeó el hombro del rubio con fuerza. Antes de acabar en más guerra fueron detenidos por su sensei, el guapo de cabellera plata.
La rubia murmuró cosas sin significado, poco a poco se reincorporó para saber por qué sus amigos fieles se habían peleado.
Haruno fue la boquita suelta que dejó salir lo que avergonzó al de mirada seria anteriormente.
Las orbes miel de Mināru se abrieron como platos —Con que Sasuke cantó. Pero lo que es peor y aún más raro... ¿¡una canción de amor!?— inmediatamente fue callada por su amiga pelirosa. Tanto ella como la fémina contraria recibieron miradas de los masculinos, quienes trataban de entender un poco aquél grito, y además de que Sakura le tapase la boca.
—¿Y por qué cantaba Sasuke?— ella preguntó curiosa. Haruno se encogió de hombros mucho más nerviosa —¿Segura que no sabes... Sakura-chan?
—¡S-Segura Minā-chan!— ella asintió, sonriéndole para tapar aquellas gotas de sudor.
