Pov Abril Garza.
Me estiré y abrí mis ojos lentamente.
Todo esta muy oscuro.
Inspiré con fuerza, sonriendo al sentir el glorioso aroma de Samantha impregnado a mi.
Sentí su duro pecho en mi espalda, y su brazo rodeando mi cintura posesivamente.
Intenté moverme, pero Samantha emitió un leve gemido y me apretó con más fuerza. Roja como un tomate al recordar lo que había pasado hace unas horas, gire dentro de sus brazos, y me encontré con el rostro de Samantha a escasos centímetros del mío.
Dios santo, es extremadamente tierna cuando duerme.
Su rostro esta relajado, y sus labios no poseen aquella típica muestra sarcástica. Parece una niña pequeña.
Levante mi mano derecha para acariciar su mejilla con suavidad, y Samantha suspiró.
-¿Siempre miras a la gente cuando duerme?
No abrió los ojos, y su voz sonó muy baja.
Sonreí.
-Oh, sí. Es un pasatiempo de lo más entretenido
Samantha abrió los ojos durante unos segundos, y luego los volvió a cerrar, mientras una tenue sonrisa se expandía por su rostro.
-¿Ya es de noche?
-Si. Dormimos todo el día
-Mmh -Samantha rodó hasta dejarme debajo de ella. Y enterró su rostro en mi cuello.
-¿Qué haces?
-Tomemos un baño -se limitó a responder, para luego ponerse de pie y estirarme una de sus manos- Vamos
La tomé, y la deje guiarme hacía la gigantesca bañera.
-¿Por qué todo es tan grande aquí? -susurré, y ella solo soltó una carcajada, mientras abría la llave del agua caliente, y luego se giraba para verme intensamente.
Con un sonrojó, caigo en cuenta que estoy desnuda, igual que ella. Me apresuré a darme la vuelta, dispuesta a buscar algo con lo cual cubrirme en ese instante. Pero Samantha rodeó mi cintura y me estrechó con fuerza por detrás, enterrando su rostro en mi cuello.
-Estoy desnuda -susurré.
-Lo sé, y me encanta. Tu me encantas -me hizo girar entre sus brazos y me sonrió torcidamente- ¿Pensaste que nos íbamos a bañar vestidas o qué?
Rodé los ojos, apretandome más contra ella para cubrir mi desnudez, y Samantha gruño levemente.
-No estoy acostumbrada a andar desnuda frente a... la gente
-Demos gracias a Dios por eso -susurró, y luego me tomo en brazos, sumergiendome en la bañera. El agua estaba caliente, y me relajé en cuanto entré en contacto con ella- siéntate -me ordenó, y obedecí con una ceja alzada mientras la veía.
-Eres una dictadora -le reproche y Samantha sonrió mientras se metía en la bañera detrás de mí, quedando con sus piernas a mi alrededor y su pecho contra mi espalda.
Me abrazó, mientras dibujada círculos imaginarios sobre vientre, y yo inhale con fuerza al sentir su erección contra mi baja espalda.
-Me gusta que me obedezcan -respondió con simpleza.
Estuve a punto de contestarle, pero remplace las palabras mordaces por un gemido en cuánto su mano entro en contacto con mi intimidad.
-Samantha... -me mordí el labio con fuerza, sintiendo sus hábiles dedos acariciarme allí abajo.
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Suya | Rivari
FanfictieElla era una mafiosa, ella una simple universitaria. Abril al ser secuestrada termina en las manos de una mujer como Samantha Rivera. Terriblemente poderosa, posesiva y seductora. Samantha no sabía porque la había aceptado como un "Regalo". Lo úni...