Capítulo 6

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JungKook debió imaginarse que algo así pasaría, él debió planteárselo desde que pasó a recogerlo y lo vio vestido de aquella forma

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JungKook debió imaginarse que algo así pasaría, él debió planteárselo desde que pasó a recogerlo y lo vio vestido de aquella forma. Con esos pantalones que abrazaban su lindo culo y esa camisa con cuello en V que mostraba parte de su pecho, junto a la chaqueta que no tardó en quitarse nada más llegó, dejando aun más de su ligeramente bronceada piel al descubierto.

El omega grita sexo cuando lo veías y parecía muy prometedor, del tipo sucio y rudo, de ese que te mantenía despierto toda la noche y que te hacia querer quedarte en cama todo el día siguiente después de tener algunos de los mejores orgasmos de tu vida.

Relamiéndose los labios mientras veía al omega mover las caderas y el culo sexualmente (no, no se había equivocado de palabra) en la pista de baile, Kook tomó su vaso de ron-cola y tomó un trago.

TaeHyung le había invitado a ir con él, pero aunque a JungKook le encantara bailar, esa noche no estaba muy de ánimo. O no lo estuvo hasta ese momento, porque repentinamente tuvo el impulso de ir a la pista con él.

Frunciendo el ceño, miró con cautela al tipo que había puesto sus sucias manos en la cintura de su omeg-... de TaeHyung. El hombre se inclinó para hablarle al oído, TaeHyung se giró y le sonrió asintiendo a cualquier cosa que este le hubiera dicho.

Entonces comenzó a bailar junto a él, tan cerca que JungKook daba por sentado que debía estar rozando cada parte de su cuerpo contra el extraño. Aquello no le hacía ni puta gracia a Kook, pero sabía que el omega solo trataba de provocarle, por lo que se tragó su enojo y miró todo el show con semblante impasible.

Cuando el tigre le miró por sobre el hombro del tipo y le sonrió, JungKook le arqueó las cejas.

—¿Te diviertes? —Preguntó, a pesar de que sabía el otro no le escuchaba, por lo que al final solo levantó su vaso en dirección a él como si estuviera haciendo un brindis y tomó otro trago.

En su cabeza, JungKook pudo vislumbrar perfectamente la mueca de fastidio que el omega le lanzó, debido a que realmente no podía ver muy bien, gracias a la poca iluminación del lugar.

Entonces su vista se vio bloqueada por alguien que se atravesó en su camino. Mirando hacia arriba a la persona frente a él, JungKook vio el atractivo rostro de una pelinegra.

—Hola —la chica dijo, con un claro tono de coqueteo—. ¿Por qué tan solo?

—Bueno, ahora no lo estoy. Tú estás conmigo, cariño. —La chica soltó una baja risita y tomando su respuesta como una invitación, tomó asiento junto a él, dejando la copa en su mano sobre la mesa y apartándose el pelo para dejar su desnudo hombro y cuello libre de marca a la vista.

—¿Eres nuevo por aquí? No recuerdo haberte visto antes.

"Eso significa que es habitual aquí, ¿eh?", JungKook pensó.

El alpha de un depredador-KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora