3 Niños En Casa

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* Su mano recorría mi espalda desnuda de arriba hacia abajo, sentí su respiración suave y el sonido de su corazón entraba en mi oido derecho como una dulce melodia del cielo.

* Por fin lo tenia a mi lado, me removí un poco y enseguida sentí el dolor en mis piernas y es que dormir toda la noche con las piernas abiertas no era tan como pensé, pero el dormir unidos rosa la noche lo valía.

- Buenos días mi amor -sentí la voz ronca de Tom, me levante un poco para mirarlo-.

- Buenos días mi vida -le sonrei-, tienes mucho de estar despierto?

- Algo -me sonrió divertido-, duermes bastante mi reina.

- La costumbre de siempre entrar tarde a clases -dije encogiendome de hombros cuando se me vino a la mente la universidad-, Dios Tom tu tienes clases temprano!!

- Tenía...

- Me hubieses levantado, qué tal si te regañan por mi culpa?

- No lo harán, además no todos los días se amanece de esta manera u tenía que aprovechar -me sonrió-, además tu vales más que todo eso.

- Pero...

- Tranquila, yo ya envié un mensaje avisando que no iría.

- Seguro y quizás te metes en problemas...

- Tranquila mi vida, pero si tengo que irme

- Por que?

- Tengo una reunión con unos inversionistas en la empresa junto a Bill y a eso si no puedo faltar, pero tranquila es en tres horas.

- Entonces me puedo volver a relajar -le dije y vivimos a abrazarnos-, Tom?

- Dime?

- Ya... Ya te puedes salir de mi? -pregunte con mis mejillas completamente rojas, por suerte estaba acostada sobre su pecho y no me podía ver del todo-.

- No.

- Yo creo que si.

- No -me volvió a repetir bajito riéndose-.

- Claro que si -dije, me levante de pronto y un gemido salio de ambos ya que al sentarme Tom volvió a entrar en mi-.

- Maldición TN -dijo y me jalo de nuevo para juntar nuestros labios, pero esta vez me levante poco a poco soltando un gemido leve, pero Tom me volvió a jalar hacia el-, por que te vas?

- Tenemos que bañarnos Tom y desayunar -dije riendome-.

- Esta bien, pero nos bañamos juntos?

- No.

- Si!

* Pase la toalla por mi cuerpo riéndome de Tom qué le había caído shampoo en los ojos por andar de pervertidos en el baño.

- Espérame! -me grito mientras salia del baño-.

- Iré a hacer el desayuno amor, te espero en la cocina.

- No, espérame ahorita por fis.

- Chaito -le dije riendome-.

- TN!! AMOR!! -fue lo último que escuche cuando me dirigía a la cocina-.

- Buenos días pecadora -me dijo John entrando a la cocina-.

- Qué haces aquí? -pregunte al verlo-.

- Vivo aquí

- Pensé que estabas con Heidi?

- Estaba, acabo de llegar -me dijo dándole un mordisco a la manzana que tenia en sus manos-, por favor dime que el que esta en tu habitación no es Tom -dijo y me alce de hombros-.

- No me vengas a sermonear por estar con el.

- No, no es por eso.

- Entonces? -pregunte mientras sacaba algunas cosas para hacer el desayuno-.

- Tom ayer le dijo a Heidi qué sabe que esta conmigo.

- Lose, el me lo contó ayer, deberías estar contento no?

- Pues si, pero no he hablado con el desde ese entonces y por más que sea Heidi, es su esposa aun.

- Te sientes incómodo?

- Algo así...

- Pero si te sirve de algo, yo no sentí a Tom rabioso, ni enojado, ni nada por eso.

- Y no lo estoy -dijo Tom entrando a la cocina con nosotros mientras me abrazaba por detrás-, buenos días cuñado.

- Aléjate de ella Kaulitz -le dijo John serio-.

- No lo haré -le sonrió Tom pegándome más a el-, y como dejaste a mi esposa? -pregunto Tom como si nada y John pareció palidacer-.

- Kaulitz... yo... Encerio perdón.

- Tranquilo John, al menos contigo es feliz no?

- Pues si, pero...

- Tranquilo John encerio, además a la persona que yo amo es a otra -dijo sonriendome-, ahora te puedes largar? -pregunto Tom-, quiero tener a tu hermana para mi sola -dijo de pronto y to reí, a lo que John se puso más serio-.

- No, lárgate tu! -dijo John jalando me hacía el-.

- Por que no los dos se largan de la cocina y me dejan hacer las cosas tranquila -dije riendo y los dos me miraron mal-, no fue una pregunta, fue una orden, se me largan de mi cocina! -grite y los dos salieron mientras yo me quedaba riendo-.

* Pasaron unos diez minutos y el timbre sonó, John se levantó para abrir encontrándose con Papá.

- Señor Schmidt -lo saludo John-.

- No me digas así John -lo regaño papá, mientras Tom y yo reímos-.

- Schmidt -lo saludo Tom-.

- Kaulitz aun sigues aquí? -pregunto papá mirándome mal y yo me encogí de hombros con mi cara roja-.

- Tu hija me tiene secuestrado -dijo riéndose mientras volvía a sentarse con John en el sillón frente a la televisión donde estaban viendo un partido de Fútbol-.

- SE que mi hija no tiene tan malos gustos -dijo caminando hacia a mi-, hola princesa.

- Hola papi -le di un beso en la mejilla-.

- Qué haces?

- Me tienen de esclava papi -le dije con un puchero en la cara-.

- MENTIRA! -gritaron John y Tom desde la sala-.

- Qué haces por aquí papi?

- Pues hija vine a visitarte, además sabía que Kaulitz iba a estar aquí, tengo que cuidarte!

- No le haré nada Schmidt -grito tom-.

- No me consta Kaulitz! -le devolvió el grito mi papá haciéndome reír-.

* Definitivamente ahora tengo 3 niños en casa, a los 3 amores de mi vida.

Perdón por no actualizar antes, me quedé dormida por que estaba muy cansada por el evento de ayer, pero aquí esta el capitulo prometido!

Señor Kaulitz - Tom Kaulitz Y TN. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora