HOGAR

1K 174 16
                                    

-No creí escuchar esas palabras de tu boca - Jungkook sonrió ampliamente.

-No te acostumbres, fue momentáneo, hace mucho tiempo que alguien que no sea Yoongi o Tae me defendían de un tipo como ese - Jimin camino adelante arrogante como siempre. - ¿No le tienes miedo a esa familia?

Caminó sin esperar respuesta alguna, siguió a Jin qué caminaba directo al auto. Sabía que su propia escolta lo seguía a distancia. Había ubicado a más de dos.

-No, no tengo miedo a esa familia Park, y tu, deberías tener cuidado con ellos - Jungkook le dijo pasando junto a él golpeado levemente su lado derecho al arrebasarlo.

-Idiota - dijo solo para el.

Jeon llegó al auto y se subió como siempre en la parte de atraz cuando alguien venía con el.

Jimin ya casi arrepentido de seguir a ese tipo de buen trasero  y vaya que se lo acababa de examinar muy bien

El rubio  también subió, visiblemente molesto...

-Me vuelves a dejar atraz y te vas solo
-el rubio le dijo con unas cuantas palabras obsenas después.

-Crei que te gustaba ser independiente. - se burló un poco Jungkook.

-Estúpido, de nada te ha servido  estudiar tanto - le dijo ignorandolo por competo. Mirando por la ventana.

Media hora después el auto se detuvo. El chófer abrió la puerta y ambos bajaron. Jungkook con un poco de temor volvió a tomar la mano de Park. No pasó nada.

Caminó unos cuantos pasos y lo llevó frente a una enorme mansión.

-Aquí - dijo el heredero del Este - Es justo la mitad. Tu señor Park estarás al mando no solo del oeste sino del territorio completo junto a mi.

-Si Yoongi vota a nuestro favor - respondió el hijo único de Park.

- No te pediré que manipules su votación, se que si se lo pides lo hará. Pero para cambiar un poco las cosas en esta ciudad todo deberá ser lo más legal posible - Jungkook le dijo sin aun soltarlo de su mano.

-Me agrada escuchar eso, de vez en cuando no eres tan imbécil - Park se burló un poco. Pero la realidad es que estaba complacido.

-Entonces amor mio...

-Cómo dije - Park interrumpió. - de vez en cuando.

-Este será nuestro hogar - ignoró el comentario insultante.

-¿Me estas diciendo que viviremos aquí? - preguntó Park sorprendido. Seguramente bromeaba.

-Así es - respondió Jungkook entregando la llave. - vamos a verla.

Jimin abrió la puerta, a simple vista todo era magnífico, las paredes, los pisos, las cortinas y terminaciones de mármol.

-¿Que te parece? - preguntó Jungkook.

-Con todo respeto y agradeciendo tu intención, - habló el extrovertido rubio. - la construcción es hermosa, lo mejor que visto en años, pero la decoración es nefasta, es fría sin vida no.....

-Lo se prometido, lo se - respondió el heredero de los Jeon. - tiene los muebles básicos. Así lo pedí. Quiero que nuestro hogar sea decorado a tu gusto, si algo no te gusta, cambialo.

Jungkook le dijo acercándose tanto que lo tenía de espaldas contra la pared. Aspiró el aroma de la rubia cabellera y siguió hasta posar sus labios en el cuello del apetecible heredero de los Park.

Un golpe con la rodilla izquierda en aquel lugar del cuerpo donde sus bajos instintos rogaban por salir del prometido qué la mafia tuvo a bien asignarle a Park Jimin donde el dolor y la calentura se mezclaron y un grito ahogado retirándose del rubio sintió el joven Jeon.

SIN SALIDA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora