MADRE

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Los días pasaban, aparentemente todo estaba bien, Jimin cuidaba todas las noches a su prometido falsamente herido.

Soobin sanaba perfectamente. A tal grado que esa noche su jefe volvería por el.

-Te agradezco Park, la hospitalidad a mi hombre - Jeon hipócritamente agradeció al dueño de ese hospital.

-Es un placer, pero llevatelo ahora mismo, tal vez me lo quiera quedar. - con burla respondió Park.

-Pero si te vas a quedar a mi hijo - ambos rieron por ese comentario.

Ante la máxima seguridad que un hospital pudiera tener, salió Soobin, el señor Jeon lo subió al auto cargando al chico por el brazo.

No fue a ver a su hijo que creía mal herido, no hizo nada además de ir por ese joven y agradecer a Park.

-Creo que el sospecha algo - Dijo Hoseok.

-Absolutamente no, - respondió Taehyung. - esta preocupado y enojado. Dicen las malas lenguas qué se le está perdiendo la mercancía. Que su gente muere a diario defendiendo territorio.

-Oh vaya, ¿Qué estará pasando por su cabeza? - Hoseok preguntó al amor de su vida.

-Aun nada, pero creo que llegará a un punto donde no podrá solventar sus pérdidas - Taehyung tomo del brazo a su esposo y entró con el a su hospital.

-¿Iremos a revisar a Jeon? - preguntó Hoseok a su hermoso médico del brazo.

-No, ahí esta su futuro esposo cuidándolo, no quiero hacer mal tercio - se burlaron.

-Ven conmigo a mi habitación - propuso Park. - Aquí se duerme muy mal, harás qué caiga de la cama.

-Te levantaré si es necesario. - Jungkook se rió un poco, - ven a mi lado, hoy tengo frío.

-Pues calientate solo, - Jimin caminó hasta la puerta y salió de esa habitación. El también tenía frío, pero no podía dejarse manipular por ese irresistible espécimen.

Caminó casi corriendo hasta su casa y subió de prisa a su habitación.

No pasaron muchos minutos cuando algo se movió en su ventana. Y tocaba de manera sutil. El rubio se levantó a mirar, con su arma en la mano siendo muy sigiloso abrió la cortina.

Apuntó a la cabeza de quien se movía afuera. Con cuidado abrió la ventana para dejarlo entrar...

Park no dejó de apuntar mientras ese hombre entró a su habitación.

-¿Vas a disparar? - preguntó el visitante.

-¿debería? - preguntó el rubio.

-No lo se, tu dime - descarado respondió ese chico.

-Sal ahora, no debes estar aquí - Jimin señalaba la puerta con su cabeza.

-No me iré. Estaré aquí toda la noche y mañana saldré luciendo satisfecho y tu padre no tendrá más remedio que casarnos de inmediato. - Ese visitante dijo sin pena alguna.

-¿Estas en la edad media? - Park dijo enojado - eso ya no se usa. Nadie se casa por esos motivos.

-¿A no? ¿Te embarazaras entonces? - se burló.

-Estúpido, largate de aquí - el rubio habló más fuerte.

-Te dije que no me iré - Ese ser impaciente caminó peligrosamente hasta el armado...

-¿Quién es este y que hace aquí? - Entró Jungkook de pronto sin tocar la puerta.

-Sal de aquí gato, estoy platicando con mi novio - Ese chico tocó la cara de Park.

SIN SALIDA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora