SIN SALIDA

UN FINAL PERFECTO

-largate de aquí, aquí ya no es tu casa - gritó el señor Jeon a esa mujer que se acercaba a él con una melefica sonrisa.

Al entrar Jungkook y Soobin lo escucharon gritar y corrieron hasta allá.

-Soobin muchacho dile que se vaya - el tembloroso hombre señalaba a la mujer que no se detenía.

-¿De que habla señor? - Soobin le preguntó.

-De ella, llevala a su lugar, no se que hace aquí - espantado Jeon seguía señalando a la mujer.

-Estúpido hombre como siempre, nadie puede verme solo tu, mi cuerpo está en ese inmundo lugar donde me abandonaste, pero esto que ves es mi espíritu qué reclama venganza - ella le dijo tan cerca qué si el hombre hubiera extendido su mano la habría tocado perfectamente y descubierto el engaño.

-Señor permitame ayudarlo a ir a su habitación, creo que ha bebido demasiado - Soobin lo obligó a irse de ahí.

El teléfono de la oficina sonó, solo un aviso fue dado...

*Mañana antes del ensayo de boda habrá una reunión, hay buenas nuevas *

*Entendido *

Respondió Jungkook y colgó.

-Madre esta hecho  - Jungkook le dijo a la dama qué seguía de pie en ese lugar.

-Me iré corazón, nadie más debe verme - ella lo abrazó y dio un beso en la frente - Espero estés bien, perdoname por ponerte en esta difícil posición.

-No sabes como ha sido la vida con el madre - El aprovechó las caricias de la mujer que tanto le hizo falta en esos años.

En la habitación de Park le fue avisada también la reunión antes de el ensayo de boda de su hijo. El durmió tranquilo, podía ser mafioso o el mejor en la industria farmacéutica pero aún así tenía su conciencia tranquila, jamás fue en contra de los preseptos de la organización.

Con Jimin, mientras limpiaba su cara y ponía sus cremas faciales, Hanna le contaba en lo que habían quedado Yoongi y Taehyung después de que el rubio se fuera.

-Hanna solo no vuelvas a largarte así - el rubio le dijo molesto.

-Lo siento, pero vine a buscarte y vi que estuviste trabajando toda la noche, le llame a Yoongi y no me respondió - jamás creí que ese tipo...

-Esta bien solo no vuelvas a hacerlo - Jimin ahora consolaba a la chica que lloraba otra vez.

Por la mañana, la casa  de Park era un caos, era solo el ensayo de boda y no escatimaron en servicio ni comida o bebida. La tradición en esos casos era que el ensayo fuera en casa de uno de los novios y la boda en casa el otro.

Por esta ocasión sería diferente, ambas serían en casa de Park, debido a las circunstancias, además que Jeon alegó no contar con la experiencia para ser un buen anfitrión y odiaría hacer algo equivocado en la boda de su hijo.

Esa mañana en particular para ese hombre, no pintaba muy bien, apenas abrió sus ojos, esa mujer que lo perseguía hasta en sus sueños, ya lo esperaba para torturarlo.

-Sacame de ese lugar cariño - ella le dijo fingiendo algún tipo de dolor.

-Largate de aquí, vete a tu cuerpo - gritó el espantado hombre.

-Es la última oportunidad que te daré - ella le dijo cambiando  su tono.

-Ahí te quedaras hasta que mueras estúpida, debi matarte hace años - el hombre tomó su arma de abajo de su almohada.

-¿Que harás? ¿Vas a matarme? - ella se rió descaradamente - No puedes matar a un espíritu imbécil.

-Largate por las buenas, iré por ti hoy - el hombre respondió lanzando al piso su inservible arma.