Narro yo:
Pasaron algunos días, y todos nuevamente se encontraban en la academia descansado, ya que aquella batalla había sido bastante difícil, y entre la confusión de los antiguos Strigoi y los cansados guardianes, nadie estaba en condiciones de partir de inmediato a sus hogares pasados.
El reencuentro de aquellos que se habían perdido hace mucho tiempo fue muy conmovedor, lágrimas se derramaron , y gritos de jubilo y risas se escucharon por toda la academia durante varios días.
Incluso se pudieron recuperar a los padres de Cristhian Ozera, él cual, al ver a sus progenitores nuevamente, le fue imposible el ocultar la sorpresa, y sin mirar a nadie más ni pensar en nada, se arrojo a los brazos de sus padres quienes entre lágrimas de alegría lo recibieron con un amor, que solamente le puede dar un padre a su hijo.
Todo estaba bien en ese momento.... pero, ese momento se termino, pues había llegado el tiempo, en donde todos debían volver a iniciar sus vidas, limpiar sus nombre, revivir sus apellidos, y see felices nuevamente.
Los guardianes, seguirían cumpliendo con su labor, protegiendo en todo momento a sus Moroi asignado, pues claramente para eso es que nacieron y fueron entrenado, pero ahora, podrían estar más relajados, ya que con toda seguridad podrán salir en las noches, sin tener peligro de que los ataque un Strigoi y si eso pasa, ellos sabrán como purificarlo, y estas enseñanzas pasaran a las siguientes generaciones.
Llego el día de la despedida, ya todos los Moroi y Dhampir de todas las partes del mundo estaban volviendo a sus hogares, e igual lo hicieron los aquelarre junto con Blade.
Pero hubo una despedida que nadie deseaba.... la despedida de TN y Dimitri.
¿Por qué tenían que despedirse? Fácil... TN era la Dhampir las fuerte de todas, con poderes increíbles y la más popular de todas. Su misión ya había sido completada.... la academia San Vladimir no la necesitaba más.... y Dimitri, era el mejor Dhmapir asignado a la academia; por lo cual, no podía salir de ella.Ambos de encontraban en la entrada de la academia, las maletas de TN ya habían sido subidos a la limusina y esta misma solo estaba esperando que ella se subiera para poder emprender su viaje hacia el aeropuerto.
Pero ambos amantes estaba ahí en la entrada, parados viéndose fijamente, las palabras no salían, y los movimientos de sus cuerpos no sucedían... ¿por qué? Fácil,... ellos mismo lo sabían, si se llegaban a mover, sería para abrazarse y posiblemente no soltarse nunca, y si las palabras salían.... las lágrimas las acompañarían sin dudarlo ni un segundo.
Todo era silencio, quizás a su alrededor había ruido de personas despidiéndose o hablando ente ellas, pero, para ellos no había nada, y TN sabía que debía irse o de lo contrario desearía quedarse con él, sabiendo que no puede.
Al ver que ninguno de los dos haría, o diría algo, TN se dio media vuelta y empezó a caminar a paso tranquilo hacia la limusina, su andar era perfecto, su espalda erguida, cabeza en algo, manos entrelazadas, mirada seria y con la gracia de una reina.... pero sus pasos eran lentos, tanto como si desearan desesperadamrnte que sus pasos fueran más cortos, y el camino más largo.... no para esperar que Dimitri corriera por ella.... sino, para disfrutar de sus últimos momentos de felicidad antes de volver a las misiones monótonas.
Pero sin importar que tan lento caminara, o que tanto deseara alargar el camino, este, llego a su fin, el chófer contéstenme le abrió la puerta de la limusina y TN al tratar de entrar en ella, fue retraída inmediatamente y besada en el mismo instante.
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Tu belleza fue mi debilidad Dimitri Belikov y tú.
RandomTe saco siete años, Rose. eso no significara demasiado dentro de una década, pero ahora es un abismo. Yo soy un adulto y tú, una chiquilla. -esas fueron las palabras que Dimitri Belikov le dedico a Rose en aquella ocasión en su entrenamiento, pero ¿...