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Septiembre. Inicio de clases.

Un largo verano, sesenta y dos días en los cuales se había divertido con sus amigas, y como no, Huh Yunjin había irrumpido en sus pensamientos cada vez que podía.

Chaewon había planeado olvidarla pero, ¿Cómo hacerlo? Solo podía pensar en su beso, la atormentaba todos los días y en las noches soñaba con el sabor de sus labios.

Sus labios, su sabor, su tacto, todo seguían en su memoria y lo añoraba aún más, pero sus amigas siempre le recordaban que Yunjin tenía novio y que en todo caso, estaba jugando con ella.

Chaewon sabía que tenían razón pero, la forma en que Yunjin la había besado, era diferente.

Igual le alegraba que ahora su amiga Sakura ni pudiese reñirla, ya que ella también estaba colada por la capitana del grupo de las plásticas, Kazuha.

Cuando alguna de las dos caían en depresión siempre se consolaban entre ellas. Sakura durante el verano lloró varias veces y pasó la noche en casa de Chaewon, las dos juntas mirando películas románticas y comiendo helado mientras se abrazaban.

Chaewon amaba a Sakura y Sakura a ella, sufrir de amor por unas idiotas había fortalecido aún más su amistad. Eunchae lamentaba el momento en que sus tres amigas cayeron rendidas por unos idiotas, Yeji no podía parar de hablar de Yeonjun tampoco.

Estaban en el carro de Hyunjin, hablando tranquilamente, y listas para su primer día de clases.

Sakura estaba nerviosa, pero tenía en claro que iba a ignorar rotundamente a Nakamura.

— Te apuesto que al final del día, esta hablando con ella - le dijo Yeji a Eunchae y las dos apostaron.

— Pues perderán, no le voy a hablar. Está decidido, la superaré a como de lugar - dijo muy decidida desde el asiento trasero, junto a Chaewon, Yeji estaba de copiloto con su hermano.

— Descuida, chica. Cuanto tú superes a Nakamura, será el mismo día que Chaewon deje de babear por Huh - dijo alegremente Hyunjin, causando las risas de su hermana y Eunchae, las otras dos no estaban muy felices.

Chaewon bufó, frustrada. Ella también tenía su lucha interna, ya que después de dos meses del beso compartido con Yunjin, la iba a volver a ver.

No estaba segura de si la rubia actuaría como si nunca hubiese ocurrido o se vengaría de ella, haciéndole la vida imposible.

Llegaron hasta el estacionamiento y se bajaron del coche. Sakura dio un portazo, aún furiosa, mientras sus amigas se reían de su reacción.

— Vamos, Kkura. No te enojes - le decía Eunchae colgándose de su cuello y Sakura la ignoró.

— ¿Chae, vamos entrando? - preguntó Sakura a su amiga con una cálida sonrisa, ignorando por completo a Eunchae, quien chillaba.

— Claro - respondió Chaewon y los cinco comenzaron a caminar hasta la puerta.

Ahora, Chaewon tenía dieciséis años y estaba lista para superar este año escolar, pero para lo que aún no estaba preparada, era para Yunjin.

Y allí estaban.

— Mierda - murmuró antes de detenerse a unos pasos de la entrada, Yeji siguió sus ojos y también la vio.

— Tendrás que pasar a su lado de todos modos - le dijo en un susurro mientras las cinco veían a la rubia.

Junto a los mesones de piedra estaban el grupo de Yunjin, allí estaba ella, hablando con la chica de nombre Haerin y se veía increíble.

Su cabello suelto y largo con algunos mechones alborotados y un lazo adornándolo, la piel un poco más clara, unos jeans ajustados a los tobillos de color blanco y una blusa color turquesa manga larga que dejaba ver su abdomen. Yunjin sonreía alegremente y la cabeza de Chaewon estuvo a unos segundos de sufrir un cortocircuito.

Rivales ⊹ Purinz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora