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─ Ya podemos irnos Matt- ─ Hao llegó de la nada y detuvo sus pasos al ver la posición tan íntima en la que estaba su amigo con su novio

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─ Ya podemos irnos Matt- ─ Hao llegó de la nada y detuvo sus pasos al ver la posición tan íntima en la que estaba su amigo con su novio.

─ Me iré Hanbin, estoy algo cansado─se separó el menor.

─ Sí, cuídate.

Matthew no respondió al comentario que antes había dicho su novio, solo partió hasta su auto siendo seguido por su pelirrojo amigo, quien decía cosas sin sentido.

─ ¿Estás bien Matt? ─ preguntó Zhang al ponerse el cinturón de seguridad.

─ ¿Por qué?

─ Todo el día has traído una cara amargada.

─ Mi vida es un caos ─ golpeó su cabeza con el volante.

─ Tranquilo, dime qué pasa.

─ Estoy cansado, mi mamá está aquí en la ciudad y se la pasa defendiendo a Jiwoong.

─ ¿Qué?

─ Ella vió que nos besamos ─ fijo su mirada en la carretera para empezar a conducir.

─ ¿Qué cosa Matthew? tú ni siquiera besas a tu novio.

─ Lo sé y eso me hace sentir mal, literalmente lo estoy engañando y él no lo merece.

─ Y sí, pero ¿por qué dices que tu mamá lo defiende?

─ Le conté absolutamente todo y me dijo que si no aclaraba las cosas ella lo haría, dijo que va a alejar a Jiwoong de mí.

─ ¿Y tú quieres eso?

─ No, la verdad no sé, él se la pasa diciendo que le gusto, me cuida y me trata bien, pero yo tengo novio. Hanbin me dijo que me ama y ni siquiera supe qué responder.

─ Mucho drama.

─ Lo sé y lo peor es que ahora Jiwoong se está tomando atribuciones que no le corresponden, me escribe mucho, me llama mucho y eso me cansa, el último mensaje que vi era preguntándome dónde estaba, odio que hagan eso, además tengo como mil mensajes suyos, seguro preguntado lo mismo.

─ Perdón Matthew, pero tú le diste entrada.

El menor apenas iba a contestar cuando su teléfono de nuevo sonó. Jiwoong estaba marcandole y no le quedó más que responder en altavoz.

─ Dime.

─ ¿Ya estás en tu departamento? ─ su voz claramente tenía algo, poco audible a decir verdad.

─ No, voy para allá, se me hizo tarde.

─ ¿Por qué no contestabas mis llamadas?

 Estaba ocupado.

─ ¿Con quién estás ahora? ─ preguntó de la nada y Matthew le hizo señas a su amigo para que se diera cuenta de lo que antes le hablaba.

ni amigos, ni enemigos ∼ mattwoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora