Corazón Contra Todo [Catradora G!P] [Adaptación]

XI - Quiero mi vida junto a tí

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El auto se detuvo y bajaron, Adora miró aquel enorme edificio y leyó el nombre "Hotel Plaza"

—Bienvenida a New York— dijo Catra en el oído de Adora.

—No puede ser...—fue lo único que dijo al mirar el gran hotel.

—Ven, tenemos que indicar que ya llegamos.

Fueron guiadas hasta la THE ROYAL PLAZA SUITE una de las más costosas y elegantes suite del Hotel. Catra realmente jamás había estado allí pero cuando solicitó un lugar en el hotel solo exigió la más costosa y hermosa del lugar, pero eso si había sido un exceso cuando lo vio. Era enorme, tenía 3 habitaciones, 3 baños y medios. Tenía un comedor enorme una gran estancia y un piano. Parecía más una mansión exclusiva.

—Catra, por Dios...—

—Wow—se sorprendio la misma Catra.

—Esto es demasiado.

—Creo que me puedo perder aquí... No me dejes sola, princesa—se abrazó a su  cintura.

—Tú pediste esto.

—Pero no sabía que era tan...Así— espeto haciendo un ademan con sus manos y mirando los detalles en el techo.

—¿Entonces qué esperabas?

—No sé... Pero mira, tenemos una cocina y nevera.

—Pudimos traer a todo el colegio aquí.

—Lo se, esto es fantástico—se tiró en la cama de lo que creía ser la habitación principal en ese palacio.

—Esta vez te excediste.

—Ven acá—dijo atraiéndola y tirándola en la cama junto a ella—Esto es fantástico.

—No sé, Catra...—

—Ya, amor. Relájate y disfrutemos—besó su cuello—Son tus vacaciones. Nuestras vacaciones—pasó sus manos por la cintura, las caderas y las volvió a subir.

—Para...—

—Shh. No hago nada malo—besó sus labios lentamente saboreandola.

—Te amo.

—Yo más...—se separo de los labios que la volvían loca—Bueno, dime ¿qué quieres hacer hoy?

—No sé, esto es demasiado.

—¿Te apetece salir y solo pasear hoy por el área?

—...Claro.

Sin más ambas salieron del lujoso hotel para caminar por las calles de Manhattan tranquilamente. Fueron a una pizzería local para comer una pizza al estilo New York y disfrutar del atardecer en Central Park, si bien ya debía de comenzar la primavera, aún nevaba y se esperaba más nieve. Estaban felices juntas en el lugar nuevo y disfrutando de la mejor compañía, la una de la otra. El resto de la noche prefirieron pasarla en el cuarto viendo películas con servicio a la habitación y disfrutando de unos relajantes baños por separados.

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La mañana llegó pronto para ambas y ya Catra tenía el día planeado, listo para todo. Tenía cinco días para disfrutar y ya se había ido uno. Mientras, la ojiazul entró a uno de los baños a arreglarse, la morena hizo lo mismo, pero al salir quedó petrificada.

Aquel ángel que estaba frente a ella no podía ser su novia, debía ser alguien más.

Adora no lleva sus típicos lentes y su hermoso cabello rubio caía con suma elegancia sobre sus hombros en hermosos rizos dorados.