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Siempre me digo que voy a dejar de procrastinar. Y, cada vez, sin falta, es mentira. Se me acumulan las tareas y me pongo a hacerlas una noche antes cuando pude haberlas realizado días atrás sin problema alguno. Incluso cuando sé que las empiezo tarde, me distraigo con todo. Avanzo dos oraciones y después ya estoy en el celular haciendo cualquier otra cosa que no implique la tarea. Recuerdo que debo hacerla veinte minutos después, pero solo se repite el ciclo.

Tras horas de hacer la tarea, y cuando ya es tan tarde que no voy a dormir lo suficiente, puedo alejarme del escritorio para estirar mi cuerpo.

Me tomo una taza de té, lavo mis dientes, hago mi rutina para el cuidado de la piel y, cuando estoy lista para irme a dormir, descubro a Hila intentando irse del Penthouse.

Aclaro mi garganta para que se gire a verme. Él se detiene en su lugar. Lentamente, comienza a voltear en mi dirección. Cuando está de frente, me da una sonrisa nerviosa que yo respondo con una falsa, dándole a entender que no me ha hecho gracia. No puede andar solo por ahí.

Más que nada, intentaba escaparse. No era una simple salida, lo quería hacer a mis espaldas.

—¿A dónde vas que ni siquiera puedes decirme?— pregunto cruzada de brazos.

—Por carne— responde rápidamente.

No puedo evitar soltar un suspiro. En serio, debe recordar por qué tengo su Miraculous. Mentir no sirve conmigo.

—Apenas antier fuimos al súper a hacer la despensa— le recuerdo—. Lo único que no puedes hacer conmigo es mentir, Hila. Entre tú y yo no hay secretos, ¿o te he dado razones para que no confíes en mí?

—¡No es eso!— se apresura a decir mientras viene en mi dirección—. Es solo que... Recuerdas que los kwamis cumplimos años cierta cantidad de años, ¿cierto?

—Los ciclos, sí, lo recuerdo.

El ciclo de un kwami puede tardar cientos de años humanos en volver a ocurrir.

—Hoy es el de Nooroo y los kwami nos queremos reunir para hacer un ritual e intentar contactarlo. De esa manera, sabremos dónde están él y Hawk Moth. Incluso Tikki y Plaga estarán ahí.

—Bien, entonces no necesitas ir— digo mientras camino hacia la cocina para tomar un vaso con agua.

—¿Qué?— me sigue—. Claro que necesito ir, esta es la única noche en la que podremos tener algún tipo de contacto.

—No, Hila. Puede aparecer un akuma.

—Sí, y para eso Wayzz va a estar afuera y nos va a avisar de inmediato si hay algún akumatizado. Así podremos salir y venir de inmediato— dice preocupado—. Fue idea de Plaga y no nos pareció mala.

—Escucha— me giro a verlo—, no es que quiera ser la mala aquí, ¿de acuerdo? Pero lo sabes, Hila. Ya has pensado lo mismo que yo. Existe una gran posibilidad de que no puedan contactar con Nooroo si es que Hawk Moth se transforma. Solo van a revelar cuántos de ustedes hay y posiblemente el lugar donde se encuentren, si es que el villano encuentra una manera de tomar el control de la conexión.

Hila me ve con tristeza en sus ojos. Claro que lo sabe. Y también sabe que, como el miraculous de la Hiena, sería imprudente de su parte participar en ese ritual. Incluso si Hawk Moth sabe de nuestra existencia, no tiene información en nosotros, y podríamos correr un gran riesgo. No solo eso, si los kwamis de Chat Noir y Ladybug van a estar ahí, ellos que tienen más poder que otros, la conexión no sería difícil de establecer.

—Si Tikki y Plaga van a estar dentro de la caja y algo sale mal, ¿quién va a proteger París?— pregunto en un tono suave—. El maestro Fu nos lo dijo el día en que nos conocimos: "No se sabe el desastre que pueda causar que ustedes estén separados incluso por minutos". No podemos purificar akumas, pero fuera de eso, no hay nada que no podamos hacer, Hila.

Hyeana || MLBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora