La Princesa Pirata (Fanfic De Las Joyas De La Princesa)

Capítulo 2

Un mes había pasado y ahora la princesa Ariana estaba en Marloe con un único objetivo, llevarse a Jade Meldea y pulirlo hasta hacerlo una gema que lo amé.

Mientras tanto Jade escribia una carta que enviaría por medio de un pájaro de plumas de tonos azules con un collar azul y dorado con una mochila en su espalda, esas aves eran conocidas como Reyes del Viento, unas aves increíblemente inteligentes que podían recorrer enormes distancias volando y saber llegar a cualquier destino, capaces de recordar rostros y direcciones, los piratas Last Hope los usaban para comunicarse, al menos hasta que el "telégrafo de audio" de Eugenia estuviera listo y en condiciones.

Esperaba ansioso que llegara su falsa prometida, aún le debía terminar una partida de ajedrez, también prometió traer algunos productos para evaluarlos y ver qué tan viables eran para importar.

Sus hermanos podían verlo más alegre de lo normal cuando quedaba en reunirse con su prometido, eran felices viéndolo tan enamorado aunque siempre alegaba que era solo un buen amigo.

El plan del grupo de la princesa Ariana estaba hecho y surtió efecto más rápido de lo que hubiera esperado, tal como esperaban de la mala reputación del actual jefe de la Casa Meldea, buscó llevar a su cama a la princesa disfrazada de bailarina callejera por la fuerza e incluso intentó golpearla pero no pudo ponerle un dedo encima al monstruo.

Al día siguiente el rey Neptune llamó a la Cámara Real de Marloe a intentar resolver el problema que había provocado el padre de su objetivo con la menor cantidad de repercusiones políticas, siendo Ariana la hija predilecta del emperador Jaider.

En el trono de la sala se encontraban los funcionarios, sus herederos, el rey, el duque Phantom en su forma bestial, Amber y claro que allí estaba Ariana, elegantemente vestida y con un falso moretón en su rostro.

-Mi estimado Rey Neptune y señores de Marloe, como hemos formado nuestra alianza con la bendición del dios creador prometo que no habrá repercusiones políticas, a pesar de lo sucedido...- dijo para alivio de todos -Sin embargo...-.

Levantó el velo que cubría ligeramente su rostro haciendo más visible el daño a su rostro. -No puedo perdonar las horrendas acciones del señor Meldea, quizás crean que el motivo de mi enojo sean mis heridas físicas pero soy la única heredera legítima del emperador y la emperatriz, expreso mi ira contra Meldea por tratar de agredir a la realeza- era tan aterradora como Jaider y como el emperador del cataclismo.

-Por lo ocurrido solicito que despojen al señor Meldea de sus títulos y facultades, que nombren a Ravis Meldea, su primogénita, como la nueva jefa de la Casa Meldea...- hasta ese punto estaban todos de acuerdo, hasta Jade. -Y que envíen a su hijo, Jade Meldea al Imperio de Arbezela-.

Ahí todos los reunidos sintieron un escalofrío en su espalda, claramente no podían entregarlo así como así, era el prometido del gobernante de Pangea, más cruel y sanguinario que Jaider, sí lo hacían morirían.

-Honorable princesa Secramise ¿Me permitiría decir algunas palabras?- dijo un muy frustrado Jade -Probablemente sepa que hay rumores de que está recolectando hombres-.

-No puedo negarlo, es cierto- dijo con una sonrisa que mostraba su cinismo.

-¿¡Intenta añadirme a su colección!?-.

-¿Y qué pasa sí digo que si?- le encantaba que se resistiera.

-¡ME REHÚSO!- antes muerto a dejarse arrastrar por esa mujer despreciable, podía ver las corrientes del destino, la más fuerte lo estaba arrastrando a ella pero aún había otra corriente, más delgada y tranquila pero que podía llevarlo a un resultado diferente.

-Que pena, entonces supongo que no le importará que las deplorables acciones de su padre provoquen un gran problema diplomático entre nuestras naciones- sugirió/amenazó la princesa pero Jade no cedió.