Somos de carne.
(El corazón también es de carne)
A veces adyacentes en el error de caer en la dependencia hacia la misma, en la dependencia hacia otra persona ya sea por haber compartido muchos años a su lado, y en esos años tantos momentos, situaciones y sentimientos. Risas, llanto, estrés, gusto, locura, tranquilidad, pobreza, riquezas; creando así un lazo, una conexión que al momento de dar por terminada la relación repercute en lo más profundo de la existencia y del alma.
Soltar, desear la felicidad del otro en la despedida es sin duda el último acto de amor que podemos brindar.
Si llegas a sentir rencor u odio hacia esa persona en realidad lo sientes hacia tí mismo. Porque NO SOMOS DUEÑOS DE NADIE, somos personas, no objetos.
Fui su juguete pero alcancé consciencia.
Y al cerrar mis ojos quisiera nunca más verle.
Le deseo lo mejor pero ella ya ni me piensa,
me dice que me desea lo mismo pero ya no puedo creerle.
Evoluciono y aprendo de mis errores pues solo así se crece.
Verla siempre sonreír aunque sea a costa de mi sonrisa
es lo único que quiero hasta que mis recuerdos cesen.
Que la alcance la plenitud y viva su vida sin prisas.
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La poesía del todo
PoesíaDiario de pensares y pesares random. Nada me llena más que escribir lo que me aqueja, me incomoda o me enamora, dependiendo claro, cuál sea el caso. En la portada estamos mi hermano y yo, por si la duda carcomía de la mano de la curiosidad. Black...
