Bury all your secrets in my skin.
Hoy le permití a mi mente recordarla,
cedí a tal recuerdo porque fluyó de manera natural mientras miraba una foto de ella junto a mi hija;
tal vez fue ver lo feliz que están,
tal vez fue la canción 'snuff', que en ese momento reproducía mi celular,
tal vez aún había thc en mi sistema,
tal vez todo lo anterior.
E invité a mi mente:
-Anda, ¡ponte cómoda!, puedes verlo en esa pantalla de sesenta pulgadas o más, es un recuerdo bonito, no va a matarte.
Claro que le estaba mintiendo,
claro que persuadí a mi propia mente bajo los mandatos exigentes y nada piadosos del subconsciente;
la manejé con un poco de tacto,
lo suficiente para que, aún sabiendo que el destino era la mierda, decidiera efectuar dicho viaje de manera entusiasta.
Y respondió:
-No va a matarme sino todo lo contrario, elevará mis niveles de dopamina. Sin embargo, a nuestro sangriento vecino de más abajo y que hasta ahora no ha dejado de latir sí puede que lo haga.
...
¿¡Qué significa esto!?
¿una contra-persuación?
No importa,
aquí viene el final de la canción.
...
Oh, es tan bella y dolorosa,
tan sufrida y borrascosa.
tan trágica que desgarra las partes
más propensas del alma
para abrir camino a la catarsis.
Así y de ninguna otra forma
es que debe ser un final.
Ya sabes...
If you still care, don't ever let me know.
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La poesía del todo
PoesiaDiario de pensares y pesares random. Nada me llena más que escribir lo que me aqueja, me incomoda o me enamora, dependiendo claro, cuál sea el caso. En la portada estamos mi hermano y yo, por si la duda carcomía de la mano de la curiosidad. Black...
