Luz y oscuridad [SwanQueen]

El despertar de un nuevo Dark One

Aclaración de vocabulario

*Tanto monta, monta tanto: expresión que implica que dos cosas o dos personas tienen la misma importancia o valor. Ej: puedes preguntárselo a Luisa o a Carmen, tanto monta, monta tanto.

I

Regina abrió los ojos de golpe, sobresaltada. Miró a su alrededor confusa y asustada, y el pánico se apoderó de ella cuando no reconoció nada de lo que la rodeaba. Se encontraba en una especie de bosque y su entorno no era más que arbustos y maleza. Su propia ropa había cambiado también. Ya no llevaba los pantalones negros, las botas de tacón y la chaqueta de cuero. Ahora lucía una especie de saco gris muy poco favorecedor, similar a la pieza de ropa que Snow y Charming le proporcionaron años atrás cuando la capturaron y fueron a ejecutarla. Sin embargo, el verdadero terror la invadió cuando sintió un vacío alrededor de su cuello.

"Mi collar..." murmuró preocupada, rozando su cuello con sus manos en busca de una joya que, evidentemente, no estaba ahí. Tan pronto la mujer dio un paso al frente, mirando al suelo para buscar aquella cadena tan preciada, una versión escalofriantemente retorcida de Rumplestiltskin apareció delante de ella, riendo de forma estridente. "¡Por Dios, Rumple!" exclamó con una mano en el pecho. "Me has dado un susto de muerte. ¿Dónde narices estamos?"

"Oh, yo no soy Rumple" rio el sujeto. "Al menos no tu Rumple" Regina frunció el ceño y fue a preguntar, pero el tipo la interrumpió al volver a hablar. "Y respecto a dónde estás... te encuentras en la cripta del Dark One, por supuesto"

"¿En la qué?"

"La. Cripta. Del. Dark. One" repitió como si le estuviera hablando a un niño pequeño. "¿No estabas prestando atención?"

Regina resopló y alisó su ropa para apaciguar sus nervios.

"¿Qué narices es la cripta del Dark One?"

"El lugar en el que todos los Dark One nacen" explicó el hombre. "Estás en Camelot, querida"

"Fantástico" ironizó la morena. "¿Y tú qué diantres haces aquí? Se supone que estás en Storybrooke con los demás"

"Y lo estoy... bueno, en realidad, el Rumple real lo está" se mofó moviendo las manos de forma dramáticamente teatrera.

"Si tú no eres Rumple..." Regina alzó la vista pensativa y, lentamente, la volvió a dirigir a la persona que se situaba delante de ella. "¿Qué eres?"

"Soy muchas cosas" sonrió el tipo. "Soy la voz de tu cabeza, el poder del Dark One en tu interior... en el interior de todos los Dark One, en realidad. Rumplestiltskin solo es uno de muchos, igual que, ahora, lo eres tú también"

"¿Gold veía esto todos los días?" preguntó la reina acercándose al falso Rumple. "¿Hablaba contigo?"

"Y tanto, aunque yo no tenía esta forma, claro está" respondió con una risa. "Rumpelstiltskin ha sido uno de mis más dedicados huéspedes. No era demasiado difícil hacerle entrar en razón, siempre acababa haciendo caso a mis consejos y cediendo a la oscuridad"

"Le manipulabas"

"Tanto monta, monta tanto" se burló el hombre. "Ahora, ¿estás lista para empezar?"

"¿Empezar con qué?" Regina se apartó de aquella ilusión y comenzó a caminar por el bosque, en busca de algo de civilización que pudiera ayudarla. Sin embargo, Rumple la siguió de cerca.

"Empezar a aprender a cómo ser el Dark One, por supuesto" contestó. "Considérame tu guía, te enseñaré todo lo que debes saber y pronto entenderás y aceptarás tu nuevo poder"