El enmascarado [Dreamnotfound]

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George se quita la máscara al acabar con sus prácticas en la academia. Ahí no tenía una competencia real. Podía vencer fácilmente a todos sus compañeros sin importar que fueran más altos que él. Él no necesitaba altura porque tenía técnica, agilidad y rapidez, cosas que pocos cumplían. Después de todo era el que más tiempo llevaba en esa academia.

—Hay un torneo la próxima semana —le dice su entrenador—. ¿Vas a participar?

—Eso no se pregunta. Es obvio que participaré. Estoy coleccionando medallas de oro. Con esta llegaría a las cien.

—Hubieras llegado antes si no te hubieras retirado por un tiempo.

—Sí...

George suspira recordando aquella no tan lejana época. Tan solo un año atrás había terminado su relación con Dream. En realidad, Dream había terminado con él. Según sus palabras, había dicho que le dedicaba más tiempo al esgrima que a él. Lo que era cierto.

—¿Ya has pensado a qué universidad irás? Me ha llegado justo otra beca para ti.

—No lo sé. Quiero entrar a una universidad que merezca y no me refiero por el esgrima.

—No deberías perder la oportunidad.

Su entrenador le entrega la carta y George no tarda en meterlo a su bolso.

En el aspecto académico no le importaba sobresalir, por lo que no le llamaba mucho la atención universidad de gran nombre, solo quería tener tiempo para el esgrima.

—¿Vas al torneo? —le pregunta Sapnap que acaba de llegar a los baños.

—Sí, ¿por qué todos me están preguntando eso? ¿No es obvio?

—A mí no me ha dicho nada el entrenador y pensé que no íbamos a participar, pero al parecer solo está escogiendo a los mejores.

—Tú también eres bueno.

—Al parecer no tanto como tú ni como el enmascarado.

—¿Quién es el enmascarado?

—¿No has oído hablar de él? —George niega con la cabeza—. Estas últimas semanas han salido varios videos de él en diferentes torneos y los está ganando todos. Muchos dicen que podría hacerte verdadera competencia.

—Lo dudo. Es imposible que alguien que apenas lleva unas semanas yendo a torneos pueda ganarme a mí que tengo años de experiencia.

—Yo también creo lo mismo. Espero que participe en este torneo. Tal vez les toque juntos.

—Si es que llega así de lejos.

...

Había pasado toda la tarde investigando a ese tal enmascarado. Al parecer no habían fotos de su cara y por ello llevaba ese estúpido nombre. A diferencia de las máscaras normales, la suya tenía una cara feliz dibujada lo que lo hacía indistinguible.

Vio cada video que había de él. Necesitaba conocer a su probable competencia y por qué todos estaban tan locos por él. Incluso había comentarios en videos que decían que era guapo. ¿Cómo podían decir eso sí no le habían visto el rostro?

Apaga su teléfono y lo deja en su mesa de noche para poder dormir tranquilo. Mañana tenía prácticas temprano y necesitaba dar todo de sí.

...

Llega el día del torneo. Desde ese día ya empezaban a descalificar a los participantes que perdían más de tres duelos.

En ningún momento se cruzó con el tal enmascarado, por lo que supuso que no participaría.

—George, sigues después de ellos —le avisó su entrenador.

Su primer duelo le fue excelente como siempre. Ni siquiera tuvo que esforzarse para acabar con un 15 - 0.

El resto de sus duelos fueron iguales, manteniéndose intacto.

Ya estaba por acabarse el torneo por ese día cuando entra alguien de último momento. Su máscara lo dice todo, es el enmascarado.

George se quita la máscara para verlo mejor.

Se nota que está muy seguro de sí mismo porque ni siquiera le toma importancia a todos los que lo están viendo.

George mira la hora. Si ese tal enmascarado no quiere ser descalificado, tendrá que ganar rápido.

—No lo va a lograr —le susurra George a su entrenador.

Apenas empieza el duelo y el enmascarado ya tiene su primer punto.

George parpadea repetidas veces sin creerlo. Ni siquiera lo había visto.

—Creo que lo hemos subestimado demasiado.

Se queda atento viendo el duelo. Hace tiempo que no habían duelos tan buenos que no podía dejar de verlos.

El torneo está por acabar en cinco minutos y solo le queda el último duelo al enmascarado para poder seguir compitiendo al día siguiente.

A poco menos de cuatro minutos de acabar el torneo, el enmascarado ganó su último duelo del día, dejándolo intacto en la lista de clasificación.

—Necesito pelear con él —le dice George a su entrenador.

—Haré lo posible para que así sea.

...

Los días siguientes también se mantiene intacto y es de los pocos que están así. En realidad, solo dos más están a su altura. Uno es Wilbur, quedó tercero en la clasificación del campeonato nacional el año pasado, y el otro es el enmascarado, quién se había llevado la atención de todos.

—¡Adivina qué hice! —su entrenador llega emocionado.

—¿Qué hiciste? —dice George con poca emoción.

—Tu último duelo de mañana es con el enmascarado.

—¿¡De verdad!? ¿¡Cómo lo hiciste!?

—Tengo mis contactos. Así que prepárate. Mañana se anuncian los ganadores.

George estaba completamente confiado en que iba a ganar como siempre. Tal vez ese tipo era muy rápido, pero sus movimientos eran muy repetitivos, lo que lo volvía predecible.

...

Sapnap lo acompañó ese día supuestamente para animarlo, aunque en realidad esperaba estar en primera fila para tener la mejor vista.

Su clasificación se mantuvo intacta, incluso después del duelo con Wilbur.

Ahora solo quedaba un duelo. El suyo con el enmascarado.

Lo vio llegar con pasos firmes jugando con su espada como si fuera a tener el duelo más sencillo. Sin embargo, George estaba para demostrarle todo lo contrario.

—Buena suerte, amigo —murmuró George—. La vas a necesitar.