¿Como En Los Libros? | COMPLETA ✓

3.

Por fin subí este bello capitulo en la nueva versión!!

Para las nuevos espero disfruten y para los que ya conocen está historia lo mismo

Muchas gracias por apoyarla!
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Kevin:

Imaginen despertar a las once de la mañana solo por poder salir con tus amigos.

Algo común para muchos y un desastre en mi vida.

Sinceramente mis planes siempre son: Leer, dormir, comer, leer, escuchar música, volver a comer y etc.

Pero hoy me obligaron a hacer una excepción, ya que Delia decidió que era una increíble idea salir a jugar Vóley.

Por un lado, amaba el hecho de salir a jugar Vóley con las únicas personas a las que puedo llamar “amigos”.

Básicamente, Delia y Caleb.

Tal vez odie el hecho de salir, pero no hace malo tomar un poco de vitamina D, y más si va a estar Caleb, el cual sé que no me dejaría solo.

—¿Quieres dejar de burlarte?

Había cometido un gran error al decirle que iba a salir con mis amigos.

—Eso es imposible ¿Cuándo vendrán a cobrarme por juntarse contigo? —se rio.

Fruncí el ceño y la miré feo.

Mirarla feo: Estoy indignado, pero no puedo quejarme porque eso significa que me van a meter un putazo.

—Ya deja de mirarme así, sabes que es chiste cielo. —me despeinó el cabello.

—Deja de arruinar mis únicas esperanzas —aparté su mano con cuidado—. Iré a bañarme, para que no te quejes de la música a todo volumen.

Ella se cruzó de brazos y enarcó una ceja.

—¿Cómo me estás diciendo? —me miró.

Tragué saliva y le sonreí con inocencia.

Próximamente: mi muerte por hablarle de mala manera a mi bella madre.

—Decía que con tu permiso me iré a escuchar música a todo volumen; pero no me mates, ya sabes, así nació tu hermoso hijo, se le sale ese tonó de pendejo. —sonreí.

—Sí, claro. Anda ya antes de que me tomé en serio eso de la educación latina.

Me echó con su mano y yo me reí.

Amaba a esa doña que me aguanta.

           ————— ☼ —————

Traía puesto ropa deportiva —lo que equivale a unos pantalones y camisa cómoda con logos deportivos— y obviamente lo infaltable, mi bandana y mis Convers.

Un día me voy a quedar sin zapatos por usar los mismos siempre, pero equis, somos chavos.

Según tenía entendido, Caleb vendría por mí.

Alguien que le explique que puedo sobrevivir yo solo, es que si yo le digo ni yo me creo.

Empaqué botellas de agua y otras cosas en una pequeña mochila que planeaba llevar.

—¡Kevin están tocando la puerta! —gritó mi madre.

Bien, eso significa que Caleb ya está acá.

—¡Voy!

Abrí la puerta y me despedí antes de salir y cerrarla detrás de mí.

—Kev…