Puedo Verte Andy

Capítulo 13

—¿Tienes twitter? —pregunta Sophie, yo niego—, deberías tener uno, estaba leyendo anoche un hilo, que a mi parecer estaba interesante, la persona que lo publico, lo hizo en base a otra publicación de alguien que juzgaba los libros de las plataformas online para leer, gratuitas mas que nada y esta persona decía que gracias a estas plataformas es posible que mas escritoras puedan cumplir su sueño de llegar a publicar, la cuestión es que no pude estar mas de acuerdo con ella, tenia toda la razón. Porque si vamos hace unas décadas atrás, ¿Quiénes llegaban a publicar? —hace una pregunta retorica y yo la sigo escuchando—. Muy pocas personas, era muy difícil que pudieras hacer una carrera en esta industria, pero hoy con las distintas aplicaciones es mucho más fácil, sobre todo para nosotras las mujeres, jamás vas a encontrar perfección, ¿pero que libro lo es?

—Es cierto, no tengo redes sociales, pero si leo en algunas plataformas, cuando no tienes dinero para comprar libros, creo que es una gran puerta a nuevos mundos, además es genial poder encontrar escritores de todo el mundo y muy talentosos.

—Si. —asiente Sophie con una gran sonrisa—. Yo incluso comencé a aprender español para leer un libro que me llamo mucho la atención.

—A mi igual me gustaría leer otros libros que me aparecen, pero claro, el idioma sigue siendo una barrera, aunque puedes aprender.

—Esa gente que tira basura a las plataformas solo es gente frustrada, que se cree superior por leer solo en físico y leer clásicos, pero se pierden una infinidad de libros con esa mentalidad.

—Si, soy una persona que puede leer todo tipo de libros, me gustan los clásicos, pero como lo hacen los de misterio o fantasía, me puede realmente. —digo y me rio, Sophie también.

Vamos camino al trabajo y surgió esta conversación sobre aquellos que juzgan a los que leemos en plataformas o a los libros que salen de ahí, pero si los están publicado es por algo, tienen publico, puede que no le vayan a gustar a todos, eso es obvio, porque cada uno es diferente, pero hay otros que si apoyaran y compraran.

Todo tipo de industria es así.

Al llegar a la cafetería, ambas nos separamos para atender nuestros lugares, ciertamente Sophie aprendió rápido, así que no necesita mas ayuda, aunque de vez en cuando, ella me pregunta cosas del menú, es difícil aprender todo, pero cuando llevas tiempo, ya te acostumbras y te los sabes de memoria.

Pasan las horas hasta que falta poco para el termino de mi turno, con Sophie en cuanto podemos nos juntamos junto a la barra para hablar de un libro que comenzó a leer en Wattpad, trata de una chica que llega a un pueblo, esta en español así que le ha costado leerlo, pero avanza de apoco para comprender, esta atrapada con él, porque hay un misterio en cuanto a la protagonista y que aun no descubre.

Me detengo junto a la barra, a esta hora ya no llegan muchos clientes y si vienen son muy pocos, creo que Sophie atiende al ultimo que acababa de llegar.

—Tienes un cliente en la mesa veintiuno, Sam.

Elevo la vista e intento ver quien es mi cliente, mi turno esta por acabar, así que estaba contando mis propinas para irme y dejarle el puesto a Becca que ha pedido hacer doble turno esta semana, pues cada uno sabe donde mas le aprieta el zapato.

—Es el ultimo de esta noche. —señalo a Moly, quien se encarga de la caja.

Vuelvo a tomar mi libreta e ir hacia al fondo de la cafetería, donde siempre se colocan las parejas, porque es mas privado, aunque claro, podía haber excepciones como esta.

Me detengo antes de llegar, Robert esta sentado ahí esperando que lo atienda, tiene una sonrisa divertida, sabe que no puedo negarme, que este es mi sector y lo debo cubrir.