Capítulo 49

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2 mese después.
-¡PAPÁ... MAMÁ!
-¿Qué pasa hija?
-Mamá ¿Puedo hablar contigo?
-Sí hija ¿Qué sucede?
-Espera ¿Papá está aquí?
-No, está en el despacho en una reunión.
-Genial.
-¿Qué pasa Mía?
-Es que... Quiero pedirte algo.
-¿Qué cosa?
-Dinero.
-¿Dinero?
-Sí.
-¿Puedo saber para qué?
-Necesito comprar algo.
-¿Qué necesitas? Mi amor, tu papá y yo te damos una mesada bastante considerable ¿Para que necesitas más dinero?
-... No pasa nada, solo necesito dinero.
-Bueno entonces habla con tu papá, yo no puedo darte dinero sino me dices qué pasa.
-... De acuerdo... Hay un niño en la escuela que, que me gusta y el viernes es su cumpleaños y quiero darle un regalo; pero si le digo a papá no me va a dar dinero porque dice que no debe gustarme ningún niño hasta la universidad.
-¿Un niño que te gusta?
-Mamá no empieces, no es mi novio es solo un amigo.
-Mi amor pues ¿Qué quieres comprar?
-Un videojuego que es su favorito, sus papás no quieren regalárselo porque dicen que sí lo tiene no va a poner atención al colegio, pero él dice que no.
-Mi amor si sabes el porque no se lo quieren comprar sus papás, entonces no debes hacer lo contrario, si tú se lo regalas quizás sus padres se lo quiten.
-¿Entonces no puedo comprarle un videojuego?
-¿Tú que crees?
-¿Me puedes acompañar a la plaza a comprar un regalo adecuado?
-Por supuesto que sí Mía.
-Gracias mami, pero por favor que papá no lo sepa.
-No te preocupes, no se lo dire.
-¡Gracias! Me voy a cambiar para irnos.
-¿Ahora?
-¡Sí mamá!
-Está bien.

Mía no me dejó opción más que levantarme de la cama, ese día había amanecido con un fuerte dolor de cabeza que ni siquiera los medicamentos me lo podían quitar, pero también habían pasado varios meses en los que mi hija había estado muy alejada de mí y sabía que eso podía hacer que nos acercáramos de nuevo.

-Amor... ¿Vas a salir?
-Sí, Mía quiere salir al mall ¿Puedes quedarte con Charlie?
-¿Irán solamente las 2?
-Sí, quiere pasar un día conmigo y la verdad es que yo también quiero salir con mi niña.
-Está bien, me quedaré con Charlie.
-Gracias.
-Amor, quería preguntarte una cosa.
-¿Qué pasa?
-¿Tú cambiaste de lugar mis lociones?
-¿Las del armario?
-Sí.
-No ¿Por qué lo preguntas?
-Es que no encuentro una de mis lociones nuevas y estoy seguro que la guarde en el armario con las demás.
-¿No le has preguntado a la señora que hace la limpieza profunda?
-Sí y tampoco la ya visto.
-¿En tu coche?
-No, tampoco, bueno ya después la busco con calma.
-Ok.

De inmediato se le fueron muchas cosas a la cabeza, Mía estaba empezando a sentir algo por un niño, quería dinero para comprar un obsequio bastante costoso, las lociones de Justin era algo costosas por ser de diseñador. No quería empezar a malpensar de mi hija, pero con sus acciones previas no me estaba dando mucho margen para no hacerlo.

-¡Ya estoy lista mamá!
-Ya voy.

-Hola papá.
-Hola mi vida.
-¿Qué tienes?
-Nada mi amor, hija... ¿Tú no...? Olvídalo.
-¿Qué pasa?
-Nada, tu mamá me dijo que van a salir.
-¡Ah si!
-Diviértanse.
-Gracias.

-Mamá te espero en el coche.
-Espera Mía, ven aquí.

-Yo las dejó, voy a terminar de trabajar en algo.
-De acuerdo.
-Te amo.
-Yo más.

Justin nos dejó a solas en la habitación, Mía estaba algo nerviosa y creía saber la razón de ello.

-¿Qué pasa mamá?
-Eso quiero saber ¿Mía, tú tomaste la loción de tu papá?
-¿Yo?
-Sí mi amor, es solo una pregunta.
-Yo no lo hice mamá.
-Está bien, te creo.
-... ¡Ugh! De acuerdo sí lo hice yo pero te prometo que voy a regresarla.
-¿Puedes decirme por qué lo hiciste?
-...
-¿Se la diste al niño que te gusta?
-Aún no.
-¿Puedes decirme en dónde está esa loción?
-En mi habitación.
-¿Sabes que tienes que devolverla a papá?
-Sí mamá, ya lo sé.
-Tráela por favor, no le vamos a decir nada a papá ¿Ok?
-Ok, ya voy.

Mía fue a su habitación por la loción de Justin, yo me iba a encargar de que Justin no sospechará absolutamente nada de Mía, pero iba a hablar con él sobre el niño que le gustaba a nuestra hija.

-Aquí está.
-Gracias, amor ¿Te gustaría comprar una loción menos fuerte para tu amigo?
-Esa es la loción favorita de papá ¿Sabes por qué?
-¿Por qué?
-El primer cumpleaños que pasaste con nosotros fue el regalo que le diste a papá, desde que se la diste él no usa otra que no sea esa... Mamá, papá te ama demasiado.

Mi familia no tan perfecta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora