Mi familia no tan perfecta

Capítulo 26

-Mis antecedentes no fueron los mejores, por eso mi esposa no confía en mí.
-...

-Confío en al actual tú, pero no me arriesgaré a que alguna partícula del antiguo Justin haya quedado en ti.
-... Cariño ¿Pasa algo? Estás muy seria.
-No, no pasa nada.

Hanna
Por supuesto que mi hija no había olvidado la diferencia de horario, había sido el teléfono de Justin el que me había despertado, había sido el mensaje de Rebeca el que me había hecho salir de mi sueño.
Cambiamos de tema ya que todos notaron la incomodidad de Justin ante mi actitud, poco antes de las 4:00 am nos fuimos a dormir todos, en cuanto Justin se acostó se quedó profundamente dormido, cosa que yo no pude hacer en lo que resto de la noche.
En la mañana me levanté en cuanto salió el sol, me di un baño y salí a desayunar algo, estaba cansada y lo único que quería era regresar a la villa.

-Buenos días cariño.
-Buenos días.

Justin de acerco para darme un meso en la mejilla mientras yo desayunaba, pero instintivamente me moví y esquivé su beso.

-¿Qué tienes, que te pasa? Desde anoche estás muy en extraña conmigo ¿Te hice algo, mis amigos te dijeron algo?
-Tus amigos son increíbles, son muy lindos.
-¿Entonces que te pasa?
-Rebeca es lo que me pasa.
-¿Rebeca?... ¿¡Qué tiene que ver Rebeca en esto!? Mi amor pensé que eso ya había terminado.
-El que no ha terminado con ella eres tú.
-¿¡De qué hablas!?
-¡Prefiero hablar esto cuando estemos solos!

El mensaje de Rebeca era bastante explícito, Justin había hecho un viaje a Washington unos días antes de irnos a Italia, un viaje que salió repentinamente del cual no había querido hablar a su regreso.

-Buen día.
-Hola, buen día... Voy a lavarme los dientes, permiso.

Alessia salió a la popa donde estaba la mesa del desayuno, yo no me estaba sintiendo bien anímicamente así que mejor entre a mi camarote para no incomodar a los demás.

Justin
-¿Hanna está bien?
-Eso mismo quisiera saber, desde anoche esta muy extraña conmigo.
-¿Crees que se haya molestado por que nos quedamos con ustedes? Justin les arruinamos la luna de miel.
-No Alessia, estoy seguro que no es eso, de echo ambos le cayeron más que bien a Hanna, ella está molesta conmigo.
-De verdad espero que puedan hablar y arreglar sus cosas.
-Gracias, yo igual.

Después de desayunar Massimo y Alessia se fueron a su yate, le pedí a nuestro capitán que nos llevara de regreso a la Villa, en todo el regreso Hanna no me dirigió la palabra por más que intenté hablar con ella no quiso decir nada.

-Bien, ya estamos solos, estamos en tierra ¿¡Puedes decirme que te pasa!?. ¡Tuve que decirles a mis amigos que te sentías mal porque ni siquiera saliste a despedirte!
-No te pedí que mintieras por mí, aunque eso de mentir se te da muy bien.
-¡Hanna he intentado ser paciente pero estoy llegando a mi límite... Dime que diablos está pasando!
-¿En serio no sabes por qué estoy así?
-¡Si lo supiera no te lo estaría preguntando desde anoche!
-Washington... Dime que fue lo qué pasó en ese viaje.
-¡Fui a trabajar Hanna!
-¿Y tu trabajo implicaba pasar la noche con Rebeca?
-¿¡Qué!?
-¿¡Por qué pasaste la noche con tu ex novia!?
-¿Quién te dijo eso?
-¿A mí? Nadie, Rebeca te agradeció por haberla acompañado en la mejor noche de su vida.
-¿Revisaste mi celular?
-No, solo que tu... Amiga no dejaba de enviar mensajes y pensé que podía ser algo importante ¿Te molesta que lo haya visto?
-Sabes que no tengo nada que esconder; pero sino me crees entonces toma...

Estaba cansado de todas las veces que Hanna había desconfiado de mí, si no estaba segura del hombre con el que se había casado entonces no debimos haberlo hecho.

-¿Qué haces?
-Es más que obvio que sigues sin confiar en mí, puedes revisar lo que quieras.
-¡No se trata te esto Justin!
-¡SIEMPRE SE TRATA DE ESTO HANNA, NO CONFÍAS EN MÍ, NO ME CREES!... No puedo seguir con esto.
-¿De que hablas?
-De que te amo, de que ya no sé qué hacer para que confíes en mí... Ya estoy cansado de esto, no sé porque decidimos dar un paso tan grande como este.

Me di media vuelta y me fui a la habitación, dejé mi teléfono en la barra de la cocina donde estábamos Hanna yo discutiendo. No quería seguir ahí discutiendo con ella así que empecé a hacer mi maleta.

-¿Qué haces?
-Me voy, te puedes quedar el resto de tus vacaciones.
-¿Así vamos a arreglar las cosas?
-No podemos arreglar nada hasta que no pongas de tu parte.

Hanna me regreso mi celular, no dije nada y terminé de guardar mis cosas.