Sutil contenido sexual Sus madres siempre han sido Amigas, por lo que estas Acostumbrada a ver al famoso Tom Kaulitz y soportar sus atrevidas Acciones, pero esta vez se le fue de Las manos.
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-Tom, vendrá Sylvia, ¿Puedes limpiar la sala? —Simone pidió arreglandose frente a un espejo.
-Okey. —Asintió sin importancia.
-Vendrá Tn.
-Okey. —Se levantó limpiando rápidamente la sala.
-Conoces a Tn desde hace 19 años y no te atreves a decirle que te gusta. —Rió burlona poniéndose un pendiente.
-Es que cuando me acepte voy a romper muchos corazones.
-Pues, quien sabe... Quizás Tn ya esté apartada. —Alzó los hombros dejando al chico de trenzas bastante confundido.
Era verdad, Tom era guapo y famoso, ero Tn era hermosa, inteligente y tenía un cuerpo que enamoraba a cualquiera.
Tn le llevaba 2 años a Tom y siempre había sido muy reservada con su vida amorosa, Tom por otra parte siempre presumía sus amoríos semanales.
…
-¿Le ayudo a lavar los platos? —Tn preguntó poniendo dos vasos en el lavabo.
-Yo le ayudo, Tn... Ve con Tom si quieres. —Su madre se adelantó poniendo una mano en su hombro.
-Oh... Bueno. —La pelinegra sonrió levemente yendo a la sala en dónde el chico de piercings arreglaba las cuerdas de su guitarra eléctrica.
-Hola, preciosa. —Saludó Tom con una sonrisa.
-¿Te ayudo? —Señaló el instrumento en sus manos sentándose frente a él.
-No, ya terminé... Mejor... Ayudame con algo en mi cuarto. —Sin esperar una respuesta, tomó la mano de Tn llevándola escaleras arriba. —Vamos a estar en mi cuarto, ma. —Dijo antes de subir completamente.
-Tn se va a las 9, Tom. Baja antes para cenar. —Gritó su madre devuelta.
-¿Compraste uno nuevo? —Tn entró a la habitación del chico yendo directamente a la colección de discos que tenía.
-Ah, si... Me faltaba uno de Eminem.
-Deberías comprarme uno.
-Ya sabes que sí, sólo pídelo. —Tom tomó el rostro de Tn dejando besos en sus mejillas, algo bastante común en ellos.
-¿Tienes un nuevo chisme para mi hoy? —Se acostó en la cama del chico viéndolo con una ceja alzada.
-Mmm, puede ser... ¿De qué chisme tienes ganas? —Se acostó a su lado.
-¿Ahora hay catálogos? —Rió. —¿Con qué chica te acostaste en la semana? ¿Cuál te gustó más? ¿En qué parte lo hicieron? Ya sabes, lo de siempre, mi amigo.
