Capítulo 13

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Alerta lemon

Era de madrugada, Itachi pensaba con cuidado lo que últimamente pasaba con el rubio, desde hace días se entregaban una y otra vez a sus deseos; aún lo tenía con el sello de inmovilidad el muy cretino, lo usaba descaradamente, aunque no se quejaba, le encantaba y excitaba hacerlo de esa forma. Naruto se aferraban a su cuerpo enterrando su rostro en su pecho, el azabache observaba su tranquilo rostro, días atrás se veía estresado y ansioso, creyó por un momento que podía caer en la locura; observó con cuidado sus facciones, tenía una boca pequeña y gordita, unos ojos grandes y bastante hermosos, su cuerpo era bonito a pesar de ser hombre, era delicado, sus piernas largas y delineadas eran hermosas, su cintura era estrecha y deseable, ya lo había observado cuando quedaba en braguitas para entrar al baño, no era de piedra, mordió sus labios, creció en el interior del rubio, aún seguía en él. Naruto abrió sus ojos lentamente -ahh… -levantó sus azules con cuidado -estás duro-

Itachi se puso rojo, giró su mirada, Naruto lo vio con cuidado, sonrió ligero, se acomodó un poco, su cadera suavemente se movió -¿me deseas? -el Uchiha apretó el ceño -¿para qué quieres escuchar algo que es evidente? -el Uzumaki sonrió divertido, mordió sus labios. Itachi cerró sus ojos disfrutando, Naruto levantó su mano, la colocó en su pecho instalando un sello títere en su pecho, había analizado que hacer respecto a tenerlo en su cama toda su vida, el rubio liberó el sello inmovilizador. Itachi abrió los ojos de golpe con sorpresa -el primer sello es un seguro, acabo de liberar el de movilidad, si me abandonas te mueres, si me traicionas te mueres -el Uchiha lo vio con cuidado, era mejor a estar inmovilizado, su cuerpo no estaba rígido gracias a los ejercicios que los clones del rubio hacían con él para no atrofiarse.

Itachi lo giró bajo su cuerpo, comenzó a embestirlo suavemente adaptándose a su nueva fuerza y cuerpo. Naruto abrió sus labios comenzando a gemir -ahh ahhh ahhh -la velocidad aumentó, el Uchiha con desesperación lo empezó a embestir una y otra vez -estás tan… apretado ahhh -el pequeño levantó su trasero queriendo sentir más -ahhh más ahhh -el Uchiha no dudó, con velocidad y fuerza lo embistió sintiendo su entrada comenzar a apretar su miembro y absorberlo un poco, su miembro creció, la cama se azotaba con fuerza en la pared, el azabache lo besó con desesperación, levantó una de sus piernas, la colocó de sobre su hombro, el beso continuó y las embestidas aumentaron siendo desesperadas y erráticas, el rubio se revolcaba bajó su cuerpo haciendo un movimiento sincronizado entre ambos, podían sentir ese sentimiento de deseo por liberarse creando un movimiento descontrolado entre ambos, los dos se liberaron con fuerza, el pequeño sintió su entrada llenarse por completo, levantó su espalda disfrutando sentir ese enorme placer -aaaaaahhh-

Itachi se movía lentamente sintiendo delicioso, se acostó sobre el pequeño respirando con dificultad -al final, sigo siendo tu esclavo -Naruto acarició su fuerte cuerpo suavemente con las yemas de sus dedos disfrutando su cuerpo y su calor -no mi esclavo, mi prisionero -el Uchiha levantó el rostro con duda, lo vió con cuidado -¿estás consciente que al que has estado follando y que quien te acaba de follar soy yo y no mi hermano? -Naruto levantó sus manos, tomó su rostro suavemente con una suave caricia, lo observó con deseo -bastante consciente -besó sus labios suavemente, el Uchiha se sintió bien con esa afirmación -¿qué sucederá con mi hermano? -Naruto lo vió con cuidado -¿lo quieres a tu lado? -

Itachi lo vio con cuidado, giró su rostro tratando de entender, besó suavemente sus labios -si me quedaré contigo, quisiera a mi hermano cerca también -el rubio lo vio con deseo analizando sus palabras, también él lo había pensado bastante -pero dudo que me perdone que me follo a su persona amada cada noche -cerró sus ojos con frustración, dejándose caer a su lado, talló su rostro con ansiedad. Naruto besó su fuerte pecho suavemente sintiendo culpabilidad, lo abrazó suavemente haciéndose bolitas en sus brazos  Itachi lo vió con cuidado, nuevamente esa imagen de soledad del pequeño, lo abrazó con cuidado recordando su propia soledad, desde que estaba con el Uzumaki, no la había sentido, al cual más, a pesar de estar cautivo, se sentía procurado y cuidado, lo había sanado y le regresó a su hermano, besó suavemente su frente.

Estarán en mis manos (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora