Gabriele. Respira agitada, no lograba tranquilizarse intentaba decirse así mismo en voz baja que todo estaré bien que Victoria la encontraria lo que ocurría sería un pata de página, su temor crecía soboriaba sus últimos alientos de vida , como si su pasado había regresado para castigarla.
Desconocia donde estaba, el lugar era oscuro no sé vía a si mismo, se concentró para brilla la gente de su frente, no resultó, no vio ninguna brilló, le parecía extraño.
Su corazón latía a 1000 por hora, desconectaba de su mundo y no volverá a ver a su familia, se repetirá a si mismo — debí decirle que los amaba que no los odiaba tenía miedo de lastimarlos —. En esas repeticiones pasaron imágenes, imágenes de su vida recorría por su mente, su nacimiento, el primer abrazo de sus padres, la escuela, el dolor, la tristeza que tuvo por no ser leafeon, tanto recuerdo uno no era alegró paso por tanto dolor que era ya lo único que conocía, empiezo a llorar, era lo que oía sus llantos, no había echo nada por su vida solo aceptar la realidad, "dolor dolor dolor sufrimiento llanto llanto llanto" se lo repita una y otra vez.
Ya era tanto que sus lagrimas se segaron, sus patas encadenadas un tal vez un cuarto puro de oscuridad será sus últimos momentos a morir. No tenía qué lado ver , en un segundo su mirada se fijaba de frente como si esa lugar era lo más importante.
Con tantos pensamientos de su dolor recordó una parte, parte qué no le prestó atención un recuerdo que olvidó era de Areu.
Recuerdo que remontaba a un año atrás, momento que ella y su hermana llegaron a la ciudad.
Antes de revivir ese recuerdo, donde la mirada tiene visualizada, empiezo ver ¿Luz? Que parecía lentamente, la espeon a estar en contacto con el brillo, seré medio sus ojos por el tiempo que tuvo en la oscuridad.
No se fingo que un pokémon había enterado . La puerta se cerró, volviendo la oscura pura, se escucha un chiriyo de una silla siendo arrastrada. Se detuvo ese sonido. El pokémon de tipo desconocido colocó la silla a frente de la espeon a unos centímetros atrás, no tan a pegada.
— Bien, pegueña gatita rosada — lo decía en un tono frío y calmado— tienes algo que me sirve de utilidad quiero que me digas con completa sinceridad.
Gabrielle: ¿De que información hablas? No tengo nada que te sea útil ¿ Que quieres de mí?
— Créeme lo que digas me va a servir.
Gabrielle: no seas tan estúpido o estúpida como crees lo que diga te va a servir ¡ Respondeme!
— Sabiendo ya abras leído el diario de Khalix, sabía de los miembros desaparecido del radar mientras otra no la pokemon perfecta del trabajo la amiga cercana de Khalix Rinnegen.... Tu tía.
Gabrielle: * empezó a reír* ¿ como? ¿Mi tía? Ella no... *Interrumpida*.
— Hasta la pregunta ¿Como tiene ese lujo? Sé la verdad, ella es miembro restante de la operación contra los dos gremios.
Gabrielle: ¿ Por que las largas esencia después de la noche? *No creía las palabras*.
— En esa parte no me interesa, solo me interesa la ubicación de Khalix.
Gabrielle: no se donde esta Khalix jamás la conocí en persona no se qué pokemon es solo conozco su historia por su .. *interrumpido*.
— Diario,lo leí a esa persona quién amaba jugó con sus sentimientos fui ¡Yo! — En la última palabra, con rabia, presionaba los dientes por la ira que sentía— esa perra me utilizo destruyó el único lugar que me agrada este miserable mundo.
Gabrielle: ¡Ustedes! Causaron daño, agradezco que estén muertos.
El desconocido tiró la silla , con sus manos de espada rozo la parte derecha del pecho, dejándola con una herida no agrave, dolorido para Gabrielle, grito de dolor aún más por las varias veces que la golpeaba cada vez violento, a detenerse la psíquica escupió sangre su cuerpo cubierto de heridas, sangraba, pero no sería letal la intención del desconocido es sacarle la información no matarla no era su estilo.
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Heartbreak: La Espeon Que Posee A La Bestia [ Temporada 1 ]
RandomEsta es la historia de Gabrielle una espeon de 16 años que tiene que soportar la carga de su vida , vivir con la bestia que guarda adentro, llena de miedo por ella decide en cambiar su personalidad para que nadie se le acerque pero tod...