Cuando te necesité

Capítulo 17

POV Valentina

—Entonces... ¿Bel tuvo un colapso anoche? —le pregunto a Juls preocupada, no solo por Bel sino por Juls. Sé bien cómo son los meltdowns de Belinda y nunca es bonito.

«Lo siento Valen, no fue mi intención. Tampoco quería que supieras, porque te conozco. Sé que te vas a culpar por esto y no es tu culpa. Son cosas que pasan.» escucho que dice Belinda, y tiene razón, si me culpo, porque quería hablarle de mi pasado a Juls y eso definitivamente es un trigger para nosotras. «Hey, deja de culparte. Juliana tenía derecho a saber y tú tienes derecho a contarlo a quien quieras, así que deja de sentirte así» dice Belinda de nuevo.

Vuelvo a ponerle atención a Juls cuando dice —Hey, no fue tan malo. Pero si me asuste un poco. Sentí que te estabas moviendo y desperté, empezaste a gritar y cuando te paraste de la cama trate de calmarte, pero no me escuchabas, cuando trataba de acercarme te alejabas. Estabas llorando desconsoladamente y fui a la cocina a buscarte un poco de agua, pero cuando volví estabas en el estudio. Toque la puerta, pero seguías diciéndome que me alejara. Me senté recostada de la puerta por si necesitabas algo. A los varios minutos escuché que me llamabas, supe que no eras tú porque me llamaste Juliana. Por alguna razón, sabía que era Belinda y empezamos a conversar, tenía que buscar la manera de tranquilizarla, así que me quedé hasta que no la escuche más. —mientras habla la miro atenta, no quiero perderme un momento de la conversación —Arregle la cama y luego me volví a sentar en la puerta hasta que tuve que salir corriendo a clase esta mañana.

—Espera, ¿Te quedaste sentada junto a la puerta toda la noche... Por mí? ¿Por nosotras? —le digo estupefacta.

—Claro Val, y lo haría todas las veces que fuera necesario. Sé lo que es tener un colapso mental, tengo las cicatrices para probarlo, y sé que estar sola no es lo mejor en momentos así.

La abrazo, porque si no lo hago me voy a arrepentir. Es extraño como una persona que conozco hace una semana se ha convertido en alguien tan importante, tan imprescindible en mi vida. Es raro sentir que conoces a alguien de toda la vida con solo unos días de conocerla, pero con Juls puedo decir que es un raro bueno.

—Gracias... Gracias por cuidar de nosotras y por ser tan amable, comprensiva y paciente conmigo. Te has convertido en alguien importante en poco tiempo. —le digo mientras la tengo aún entre mis brazos.

Puedo sentir como me abraza más fuerte y luego de unos minutos de nosotras abrazándonos me habla al oído.

—Tú también te has convertido en alguien muy importante para mi Val. Espero que lo sigas siendo por mucho tiempo.

Mi piel se eriza al escucharla decir eso en mi oído. Nos separamos y nos miramos con una sonrisa cada una.

—¿Tú y Belinda están bien?

«Sí, ya se lo dije, pero díselo por mí. Y dile que gracias» —que Belinda diga eso me da felicidad, me gusta que se lleven mejor.

—Sí, y Bel dice que gracias. —veo como su sonrisa se ensancha y de repente sube un puño al aire.

—¡Sí! Te dije que lo iba a conseguir Belinda —hace un baile de victoria y me rio de su actitud. —Deja de celebrar, tonta.

—Puedo ser tonta, pero te caigo mejor. —Juls me da una sonrisa arrogante y me rio. Estas dos serán cercanas, ya lo veo venir.

Luego de que terminamos de cenar nos turnamos para hacer nuestra higiene personal. Cuando termino, salgo a la sala y veo que Juls está en el sofá con la televisión encendida, pero está al teléfono.