Cuando te necesité

Capítulo 48

Maratón 3/5 🔥🔥

POV Juliana

Val y yo éramos de las pocas personas que quedaban disfrutando de la noche, debían ser alrededor de las 2 de la madrugada. Además de nosotras, estaban Mateo, Max, Freya, Mari, Eva y Lucía. Estábamos riendo y contando cosas de nuestra infancia. Val seguía sentada en mi regazo, pero la notaba distraída y en su mundo, tal vez hablando con las chicas, no lo sé, pero luego de unos 20 minutos ella voltea hacia mí.

—¿Vamos a la habitación, Juls? —el tono de su voz es diferente, lo noto más ronco, más... sensual. Asiento y dejo que se ponga de pie, luego me ayuda a hacer lo mismo —Ya nos vamos a dormir, sigan disfrutando chicos. Buenas noches.

—Buenas noches. Descansen. —dicen todos. Mientras vamos caminando de la mano hacia la casa, noto que las suyas están un poco sudadas, como si estuviera nerviosa.

Subimos a la habitación y me dirijo a las maletas para sacar nuestros pijamas, escucho el clic del seguro de la puerta y al voltear veo que Val me está mirando como me miro hace unas horas al verme en este outfit. —Val, ¿todo bien?

Me voy acercando a ella, pero no me da tiempo a decir nada más, porque Val empieza a besarme de manera apasionada e intensa, no tardo en seguirle el beso y la sujeto de la cintura para pegarla más a mí. Siento como su lengua acaricia mis labios, pidiendo permiso para entrar y se lo concedo. Nuestras lenguas se entrelazan y estamos en una batalla campal, viendo quién sale victoriosa. Ella me quita el blazer mientras me empuja lentamente hacia la cama, pero antes de caer me detengo, sorprendida por este arrebato de pasión.

—Val, wow... ¿De dónde salió eso? —digo jadeando.

—He querido hacerlo desde que te vi en este outfit hace unas horas. Sé que probablemente te sorprendí, pero... estoy lista, Juls. Quiero que me ames y amarte de todas las formas posibles —Val sujeta mi cara con ambas manos —, sentirte y que me sientas. Quiero hacerte el amor y dejarme llevar por todo lo que me haces sentir.

Dejo salir un suspiro al escucharla, mentiría si digo que no la he imaginado de esa manera, que no he querido besar todo su cuerpo y amarla de todas las maneras habidas y por haber, en esta y otras vidas. Sonrío y me inclino hacia una de sus manos, que aún están en mis mejillas y me acarician lentamente —¿Estás segura? Porque no quiero que te sientas obligada, Val. No quiero lastimarte de ninguna manera.

—Y no lo harás, confío plenamente en ti, Juls. Contigo me siento plena y en paz y sé que será hermoso. Incluso hablé con las chicas para que, por una vez, me den privacidad absoluta. Quiero que solo seamos tú y yo, aquí.

Vuelvo a besarla lentamente y acaricio su cintura —Ok, solo... me dices si quieres parar, y lo hago. ¿Está bien? —ella asiente y se acerca a besarme otra vez.

Lentamente, llevo mis manos a su espalda y la acerco más a mí. Luego de unos besos intensos nos separamos y quedamos con nuestras frentes unidas. Tomo su crop top y lo voy subiendo lentamente hasta quitarlo por completo, veo su sostén blanco, de encaje y trago. Confieso que estoy un poco nerviosa, pero es normal, no todos los días haces el amor con el amor de tu vida por primera vez.

Val se sonroja al ver como me quedo embobada viéndola, pero acerca sus manos a mi pantalón y después de desabotonarlo, va bajándolo por mis piernas. Al llegar al suelo, quita mis botas y mi pantalón, y cuando va subiendo, besa mis piernas suavemente. Al llegar arriba, besa mi cuello de manera que siento su aliento y mi piel se eriza.

Llevo mis manos a su falda y voy bajando de la misma manera, copio lo que hizo con sus botas y su falda, pero no la beso al subir, no hasta que estemos en igualdad de condiciones. Así que cuando subo, Val me atrae hacia ella y me besa mientras va desabrochando mi corpiño, al sacarlo quedo solo en mis panties de encaje negro y noto como los ojos de Val oscurecen al ver mis pechos.