6. SERE TU VECINA

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GISELLE

Creo que no me supe explicar bien cuando decía que me iría a vivir fuera del campus, pero quería que fuese una sorpresa para mi querido vecino quien en ese momento me miraba con el ceño fruncido.

Comprendía su confusión, pero no tenía opción que usarlo para mis fines.

-¿Qué haces aquí? -preguntó cortante, dándome una ubicación de lo molesto que se encontraba.

Al parecer a Ashton Hunt no le gustaba mi presencia.

¿Pero qué hacía yo ahí?

Resulta que en el tiempo que Chris y yo tomábamos ideas para mi dulce venganza, teníamos que saber todo de ese estudiante de leyes y jugador americano quien era el mejor amigo de mi enemiga. Así que investigamos todo lo relacionado a él, hasta incluso si era de este país.

Y vaya que lo es, sin embargo, durante mi investigación me di cuenta que su madre es Sara García, quien su familia era procedente de Honduras; pero sus abuelos vinieron durante los años dos mil y fue ahí que Sara conoció a su futuro esposo.

Harry Hunt, un cocinero de gran valor para el señor Camp, dueño de una cadena de restaurantes gourmets.

Ambos se casaron y tuvieron cuatro hijos, entre ellos esta Ashton.

Mirándolo en ese momento me daba cuenta que poseía algunos rasgos latinos que no me había percatado y vaya que le hacían verse bien.

Volviendo al presente, necesitaba estar cerca del chico para poder conquistarlo lo más rápido posible y al saber dónde vivía, me dedique a buscar en ese mismo lugar un departamento; pero para mi sorpresa, había uno deshabitado al lado de él, así que aproveche mi oportunidad y negocie con el dueño, logrando que ahora estuviera ahí.

Siendo en ese momento cuestionada por el jugador.

-Yo me hago la misma pregunta -dije fingiendo sorpresa-. ¿Tú que haces aquí?

Él se cruzó de brazos, mostrándose serio.

-Vivo aquí por si no lo has notado. -contesto, volviendo a ser cortante.

El dramatismo se activó en mí, abriendo los ojos sorpresivamente y llevando mi mano hacia el pecho deje que mi boca formara una o.

-¿En serio? -pregunte exclamativamente-. Pues verás... yo también viviré aquí... seré tu vecina.

Ashton frunció más el entrecejo dando a conocer su molestia hacía la noticia, confirmándome nuevamente que no le agradaba.

-Esperemos que nos logremos llevar bien. -dije intentando que él lograse asimilar la situación ya que su silencio no me daba a conocer nada en absoluto.

Deje ver una gran sonrisa mientras esperaba, sin embargo, Ashton simplemente suspiro retraído y sin decir ninguna palabra se giró con su periódico en mano hacía el interior de su departamento, cerrando la puerta con suavidad.

Sin dejar de sonreír me di la vuelta para entrar a mi nuevo hogar, donde a unos metros se encontraba Chris en el sofá, acomodado como si se tratase de su casa, trate de no molestarme por ver sus pies encima de la pequeña mesa y me acerque a él.

Me miro con diversión cuando mi sonrisa se transformó en seriedad.

-¿Qué paso? -pregunto con un tono burlón-. ¿Se alegró con tu presencia?

Blanqueé los ojos al mismo tiempo que me senté a su lado con los brazos cruzados.

-Es demasiado expresivo. -dije con sarcasmo.

-¿Te dio la bienvenida?

-Si y me dio un abrazo.

Chris rio a lo bajo.

Perfecta CoincidenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora