Décimo platillo

196 51 17
                                    

Su domingo resultó ser laborioso y no descansaron tanto como les hubiera gustado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Su domingo resultó ser laborioso y no descansaron tanto como les hubiera gustado.

No podían comprar otro lugar más grande para los clientes, aún no tenían los fondos necesarios para uno más amplio por lo que optaron por poner más mesas y sillas.

La parte interior tenía dos mesas más y por la parte de afuera decidieron poner tres, unas más pequeñas pero servirían para atender más clientes. Eran las nueve de la mañana, el restaurante no había ni abierto aún pero ellos ya se encontraban trabajando ahí desde las siete, intentando remodelarlo.

— Lleva la mesa y yo llevo las sillas — dijo Beomgyu. De las tres mesas que dijeron que pondrían afuera lograron poner solo dos, faltaba una más y se estaban encargando de acomodarla antes de abrir.

— ¿Pegaste el cartel? — Yeonjun jalaba la mesa hacia la salida, no podía dejarlas fuera mientras no estaban ¡qué tal si se las robaban!

— ¡Sí! Está en la puerta.

Yeonjun caminaba de espaldas, jalando de la mesa mientras observaba a Beomgyu ir por las sillas que la acompañarían. Necesitaban a más personas de manera urgente, ellos solos ya no podían con todo esto.

Intentó pensar en más formas de buscar aunque sea unas tres personas más, dos para meseros y uno que le ayudara en la cocina ya que tampoco les daba el tiempo para preparar tanta comida.

— ¿Te ayudo? — escuchó a sus espaldas y su sonrisa no tardó en aparecer cuando enfocó los bonitos ojos miel que tanto amaba.

— No hace falta, solo tengo que sacar esta mesa.

Prácticamente ya se encontraba en la puerta de salida, solo tenía que moverla un poco más para que logre quedar en un buen lugar para los clientes.

— Déjame ayudarte, chefcito, pareciera que tus brazos están a punto de romperse.

Yeonjun no pudo objetar cuando Soobin ya había tomado la mesa y la había posicionado en el lugar deseado tan rápido ¡pero no era su culpa! Estuvo cargando y moviendo cosas desde muy temprano en la mañana, ya estaba exhausto.

— Muchas gracias, Soobin — Yeonjun quería hablar un poquito con él, solo cruzar unas cuantas palabras antes de ponerse a trabajar pero no pudo ignorar la presencia de dos personas que venían detrás del rubio — buenos días, Taehyun y...

— Kai, Hueningkai — Kai le dió un apretón de manos a Yeonjun para presentarse.

— Buenos días, Yeonjun — saludó Taehyun — no quiero sonar descortés pero...

— Beomgyu está adentro, ve a echarle una mano con las sillas — señaló con su pulgar, no pudiendo evitar una risa cuando vió a Taehyun entrar casi corriendo.

— Wow, algo está pasando aquí y no me estoy enterando — Hueningkai opinó, echándole una ojeada al lugar.

— El otro día traje a Taehyun aquí a comer y se enamoró del amigo de Yeonjun, Beomgyu — explicó Soobin, mirando los cambios en le restaurante.

Taste to you • SoojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora