Capítulo 5

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"Hwang Hyunjin, líder de una gran empresa y uno de los alfas más codiciados ¿ya tiene omega?
Está ha sido una de las preguntas más relevantes desde ayer donde se logró captar a un omega ir al condominio del alfa antes mencionado. Al igual que se pudo notar una marca en el cuello de dicho omega que aún no sabemos con exactitud de quién se trata. ¿Quién es aquél afortunado que logro robar el corazón de Hwang?"


Los paparazzi habían sido muy astutos para lograr tomar fotos de cuando Jeongin había ido a casa de Hyunjin pero no tuvieron la suficiente astucia para lograr dar con su identidad. Tenía muy claro que en cualquier momento la noticia podría armar un gran escándalo pero no pensó que sería tan rápido y mucho menos pensó su propia compañía seria la que publicaría la noticia.

Vaya sorpresa que se llevó cuando despertó al tener más de veinte llamadas de Soyeon y Changbin y no se diga de los mensajes que eran demasiados pero aún así no los contestó. Les explicaría en persona.

Acomodó todo y bajo las escaleras encontrándose con Hyunjin quien también acaba de enterarse de la noticia. Al igual que Jeongin estaba preocupado, porque no había pensado en que hacer cuando eso sucediera pero lo que más le preocupaba era otra cosa, pues tendría que dar una declaración y si negaba estar enlazado su padre le pediría una explicación, pero si aclarara estar en una relación perdería la última oportunidad de volver a enamorar a Felix, y peor aún. Así no podría romper el lazo que tenía con Jeongin y podría ser peor.

Todo iba mal.

— Lo acabas de leer ¿cierto? — dijo el alfa y volteo a ver a Jeongin quien terminaba de bajar las escaleras.

— ¿Piensas dar una aclaración? — preguntó, conocía bien el protocolo que se hacía en esas situaciones y mientras más se tardará en confirmar o desmentir solo saldrían más rumores.

— No lo sé, todo esto es un gran lío — tomo asiento en frente a la mesa del comedor. Estaba frustrado por todo lo que estaba pasando. — Tú eres un problema — susurró para sí mismo, sin detenerse a pensar en sus palabras. Por desgracia Jeongin escucho lo último y su estómago se revolvió con aquellas palabras. ¿Seguía siendo un problema?

No, él no era un problema. Nunca lo fue y jamás lo sería.

— Hagas lo que hagas piensa dos veces antes de actuar — Jeongin no le dirigió la vista y se aproximó a la salida. No sin antes detenerse en seco para decir algo más. —Y yo no soy un problema, si no hubieras abusado de mí nada de esto estuviera ocurriendo — escupió sus palabras y continuo su camino. Salió de allí antes de que Hyunjin pudiera notar las lágrimas que corrían por sus mejillas.

Se sentía herido. Esas palabras le habían recordado a su infancia y como su familia lo tachaba de ser un problema, fue tan duro afrontar todas esas palabras y más cuando le hicieron creer que era un "error". Pero no, él no es un error.

Camino bastante tiempo, podía tomar un taxi fácilmente pero siempre prefería caminar y disfrutar del ambiente que se generaba, llegó directamente a su trabajo y casi al instante recibió algunas miradas que lo juzgaban. Y bajo todas esas miradas solo tomo el ascensor en dónde estaba una omega de cabello rubio, presionó el botón y pronto el ascensor se cerró.

— Vaya que eres astuto Yang — hablo la omega llamando la atención de Jeongin.

— ¿Disculpa? — el peliblanco volteo a ver a la chica que solo veía al frente y no le dirija la mirada.

— Fue muy astuto de tu parte meterte con Hyunjin — la omega dirigió su vista a Jeongin con una sonrisa en su rostro. — ¿Cómo lo hiciste?

— ¿Hacer qué?

—  No te hagas él que no me entiende, Hyunjin es tu alfa y lo sé muy bien — dijo con mucha seguridad en sus palabras.

— Creo mi vida privada no debería de importante, Lee — termino por decir al leer el nombre de la chica en el gafete que está poseía, era un gafete de acceso, lo que significaba que solo estaba de visita.

— No te lo tomes a mal, solo quiero hablar contigo — siguió los pasos Jeongin quien ya había salido del ascensor.

— ¿Qué es lo que quieres? Habla rápido — se detuvo y volteo a ver a la chica. Era de su misma altura.

— Lee Yukjo, un gusto Jeongin — saludo como desde un principio debió hacerlo. —Se todo lo que ocurre contigo y Hyunjin.

— Ve al punto Yukjo — su lobo se puso demasiado inquieto con la presencia de Yukjo y sumando la mezcla de emociones que tenía actualmente lo hacía querer huir de todo.

— Yo quiero ser quien te quite su marca — la omega sonrió al decir sus últimas palabras, se veía decidida con lo que le dijo. Pero claro, esa decisión no le correspondía a él. Con que la marca de Hyunjin ya no estuviera en su cuello se daba por satisfecho.

— Eso no corresponde elegirlo, ve y habla directamente con Hyunjin — sonrió y se dio la vuelta. Entro a la sala y se encontró con Soyeon quien tenía el celular en la mano, hace ya varios días que trataba de comunicarse con Yuqi pero todos sus intentos siempre eran en vano, la chica se había ido a Estados Unidos y no lograba contactarla, quizá le robaron el celular.

Y nuevamente, el intento de escuchar la dulce voz de su novia fue en vano, de nuevo su llamada fue transferida al buzón de voz.

— ¿Ahora si me vas a explicar que está pasando? — la alfa guardo su celular y posó su vista en Jeongin.

—  No tengo muchas ganas de hablar de eso — tomo asiento a su lado y soltó aire con mucha pesadez.

— ¿Te hizo algo? — su semblante cambio en un segundo al igual que su postura.

— ¿Quién? — contesto. Se hacía el que no entendía cuando era lo contrario.

— Sabes muy bien de quién hablo Jeongin — dijo con un tono de voz más serio que podía desmontar también una pizca de enojo. — ¿Te hizo algo? — volvió a preguntar. Jeongin asintió y acomodo sus brazos sobre la mesa para recostar su cabeza en ellos.

— Dijo que soy un problema — soltó sin más.

— Innie... No lo eres — sin decir más solo lo abrazo.

A Jeongin le afectaron esas palabras, porque a pesar de que asistió a terapia psicológica ese tipo de comentarios hacía su persona siempre lo terminarían afectado.

Algunas cuantas lágrimas caían de sus ojos, se sentía completamente herido, hacía ya mucho tiempo que ese tipo de opiniones ya lo le afectaban pero ¿por qué viniendo de Hyunjin le estaba afectando tanto?

Soyeon se concentro en liberar unas cuentas feromonas para calmar a Jeongin quien solo se resguardaba en el abrazo que la alfa le brindo. Siempre que estaba junto a Soyeon o Changbin se sentía protegido.

— ¿Interrumpo? — una voz apareció en la puerta, Jeongin rápido se secó las lágrimas y se alejó de Soyeon para componer su postura.

— ¿Qué quieres Hyunjin? — hablo Soyeon al mismo tiempo que se levantó se su asiento.

— Vine a dar una aclaración por los rumores que sacaron — logro percibir el aroma de la alfa, ella parecía estar enojada. En realidad, lo estaba.

— Que lastima, aquí es una sala editorial no es el lugar correcto para dar aclaraciones — se acercó a el otro alfa y con cierta delicadeza le dio un empujón para sacarlo de allí, Hyunjin le vio con reseñó, pero le importo poco. — Ve a la recepción, allí te darán información — le sonrió con victoria y le cerró la puerta en la cara.

Al otro lado de la puerta Hyunjin quedo bastante indignado, escucho algunas risas y decidió irse. Con un paso firme se dirigió al ascensor. Bajo a la recepción en donde de mala gana Soyeon lo mando.

Estando a unos pasos de la barda donde se encontraba un omega, quien al parecer era el recepcionista de allí pues estaba recibiendo algunas llamadas. Antes de avanzar hacía dicho omega saco su celular para llamar a Felix, quería dejarle claro que la declaración que está a punto de hacer era "falsa" y la hacía por conveniencia. Que gran mentira.

— Hyunin, te estaba buscando — le hablo una voz dulce y amable detrás suyo. Al darse la vuelta se encontró con una linda omega, mucho más baja que él y con un lindo cabello rubio.

— Yukjo, que sorpresa verte — la vio con algo de confusión.

Lee Yukjo, excompañera y casi novia que conoció ya que sus padres eran amigos, ella es una modelo algo reconocida por su gran belleza y carisma. No sabía el motivo del porque apareció así de repente, no mantenían ningún contacto más que solo saludarse por educación.

— Seré directa Hyunjin, quiero que me cortejes — sonrió y casi soltó una carcajada al ver la expresión en el rostro de Hyunjin.

— ¿Disculpa? Yukjo no mal entiendas las cosas, yo ya tengo un omega — rio con ironía.

— Tú y Jeongin no son nada Hyunjin, cuando la declaración que harás se haga pública Felix no va a querer nada contigo, aparte el encontró a su destinado — trato de ser lo más sutil al decir lo último, sabía que a Hyunjin le lastimaba su ruptura y lo que menos quería es que el alfa se sintiera mal. — Tal vez podemos revivir lo que hace tiempo pudimos tener, no te quiero obligar a nada Hyunjin, solo quiero que lo pienses — le dio una última sonrisa y se marchó.

Le gustaba Hyunjin, en realidad nunca le dejo de gustar, se tuvo que conformar con su amistad el día en que Hyunjin conoció a Felix, pues el alfa quedó flechado con el omega. Pero ahora, quizá tenía una oportunidad para estar con Hyunjin.


(...)


— Solicite esto de una manera imprevista, pues no pensaba dar ninguna aclaración a los rumores que salieron recientemente sobre mi vida amorosa, pues ese es un tema de mi privacidad. Debido a las fuertes declaraciones que algunos internautas han estado haciendo hoy quiero confirmar que sí, estoy en una relación y también tengo un lazo con mi omega, Yang Jeongin — termino por decir.

Soyeon apagó su celular luego de mostrarle la publicación reciente de su propia empresa. Jeongin estaba en un estado totalmente de shock, no sabía cómo reaccionar en ese momento y mucho menos al pensar que ahora es público que es el omega de Hwang Hyunjin.

No estaba listo para eso, él estaba acostumbrado a ser parte de quienes publican las controversias, pero no a estar dentro de una. Él se encontraba bien viviendo una vida normal pero ahora todo era tan diferente a lo que se había acostumbrado, no quería eso.

— Necesito irme de acá Soo — susurró mientras sus ojos se cristalizaban por las lágrimas acumuladas debido a tantas emociones encontradas en tan poco tiempo.

No sé sentía bien, fueron demasiadas emociones solo para un día que aún no daba por terminado. No es débil, solo necesitaba espacio para asimilar todo lo ocurrido. Primero, las palabras de Hyunjin le hicieron recordar lo que tanto le hizo daño, haciéndole entrar en cuenta de que sí, tal vez él era un problema o peor aún, que era un error. Aún no terminaba de acomodar sus emociones cuando ahora su relación falsa se había hecho pública, lo que implicaría estar en boca de muchos, recibiría muchas críticas hacia su persona y su autoestima no era el mejor para soportar todo eso.

Con ayuda de Soyeon bajo por las escaleras de emergencia, no quería llamar la atención después de lo que Hyunjin declaró. Llegó hasta el primer piso sin ningún problema pues por las escaleras nunca hay nadie, la mayoría siempre toma el ascensor y en ese momento eso era una gran ventaja.

Apresuró su paso hacía la salida, pues algunas personas estaban allí. Se sentía como un agente en cubierto que no debía de ser descubierto en ningún momento.

Salió del edificio sin ningún problema, él no era una persona muy conocida, al ser solo un periodista no tenía fama así que la mayoría de las personas que ya vieron la confirmación que dio Hyunjin solo conocían su nombre y no su rostro, por ahora.

— Tu vuelve, me puedo ir yo solo desde aquí — la alfa dudo, asintió y volvió por dónde había venido. Jeongin siguió caminado hasta llegar a su destino, sin pensarlo dos veces entro por la entrada del edificio, sin saludar. Solo fue directamente hacia las escaleras, sus pasos eran más largos y rápidos. Corría en vez de caminar.

Entro a su departamento y al cerrar la puerta callo al piso, se sentía perdido. No sabía que hacer o como afrontar todo lo que ocurría, solo quería huir lejos de allí. Algunas lágrimas se hicieron presentes, se sentía desprotegido en ese momento que solo quería que alguien lo abrazara y le dijera que todo estaría bien.

Unos golpes se escucharon tras su espalda, no le importo tener las mejillas mojadas de lágrimas y se levantó del suelo. Suspiro y abrió la puerta, no dijo nada al verlo allí, solo se quedó esperando a que Hyunjin dijera algo.

— Vete — pronunció Jeongin entre sollozos, intento cerrar la puerta, pero Hyunjin se apresuró a evitar eso.

— Lo siento tanto Jeongin — vio los ojos llorosos del omega y no puedo evitar sentirse culpable. Pues es totalmente culpable. No soportaba ver a Jeongin así por su culpa.

— Solo lárgate, no quiero verte — intento cerrar la puerta por segunda vez, pero al igual que su primer intento, otra vez fue en vano.

Hyunjin no dijo nada, solo se acercó a él y lo rodeó con sus brazos. Jeongin trataba de alejarse mientras forcejeaba, pero no pudo. Se sentía tan decaído y perdido que terminó abrazando al alfa con todas sus fuerzas mientras derramaba más lágrimas. Solo quería sentirse protegido, ahora más que nunca sentía necesitar de su alfa. De la protección que de alguna manera solo él le podía brindar, su omega pedía no separarse de Hyunjin y no lo haría. Él y su lobo estaban experimentando una extraña sensación de protección. Era como volver a casa después de un lago y estresante día, y en realidad si había tenido un muy mal día que deseaba que jamás volviera a repetirse, pero luego de eso, estar en los brazos de Hyunjin era como un curita para el alma, pues a pesar de que el alfa había herido sus sentimientos con sus palabras quería que estuviera con él.

Mientras era abrazado por Hyunjin su llanto fue cesando al recibir leves caricias en su espalda, se sentía bien que olvidó lo demás. En ese momento no me importaba el lugar dónde estaba, ni los vecinos que los veían por casualidad en el pasillo, solo le importaba que Hyunjin no lo soltará, que le siguiera diciendo en susurros que pronto acabaría todo.

Solo quería que su alfa estuviera allí, que lo siga abrazando, que no se vaya. Solo lo quería a él.


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[Marca accidental] «Hyunin»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora