Capítulo 4

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Pasaron los días, todos los guerreros z entrenaban arduamente para la próxima amenaza, no sabían la fecha, lugar ni que quería o querían, eso sí fuera más de uno cosa que no estaba clara, lo único que sabían seguro es de la participación de un saiyan. Según Mirai, nombre que decidieron poner a Trunks del futuro para que no fuera un lío cuando los dos estuvieran juntos, las intenciones del saiyan invasor no eran pacíficas.

Krilin y Dieciocho fueron a comunicar a Diecisiete la notícia para intentar que se les uniera en esta batalla. Al principio fue reacio a la idea de volver a luchar dejando a todos esos animales sin protección y a su familia pero se dio cuenta de que para poder seguir protegiendolos la Tierra no debe estar emenazada, así que decidió unirse y así, los tres, empezaron a entrenar.

Yamcha, Ten Shin Han, Chaoz y hasta Muten Rōshi volvieron a entrenar seriamente. Sabían que contra un saiyan no tenían muchas posibilidades pero podrían brindar algo de ayuda aunque sea protegiendo a los habitantes de la Tierra.

Pan entrenaba con Piccolo, Gohan y hasta con Uub. Antes de que Goku se fuera al planeta de Bills, también entrenaba con ellos, pero como siempre, era más suave con ella o eso es lo que le parecía a ella.
Bra la invintó a entrenar en la habitación de gravedad pero siempre lo rechazaba, no hacía falta que dijera porque se negaba, Bra, sabía que era por Trunks, para no coincidir. No la pudo convencer para entrenar pero sí para quedar en Satan City junto con Mirai, la verdad, más que convencerla la sobornó con entradas para una película que Bra nunca iría a ver. Pocas veces hacían cosas que a Pan le gustaban y no perdería esta oportunidad.

Vegeta, antes de irse al planeta de Bills, entreno intensivamente a sus tres hijos. Después de cuatro días, Bra, consiguió el estado súper saiyan en un tiempo récord y es que estaba decidida a llegar a la transformación, el tiempo de paz, por desgracia para ella, había llegado a su fin.
Con instrucciones dejadas por Vegeta, Bra y sus hermanos, seguían entrenando, muchas veces acompañados por Goten y hoy era un día de esos.

Ahora, sentados en la mesa del comedor, descansaban los cuatro después de su entrenamiento con un sin fin de comida que pidieron a un restaurante.
Fue tanta la cantidad que la tuvieron que traer en un vehículo especial. Al principio, los del restaurante, creyeron que era una broma pues mientras Bra estaba al teléfono, detrás de ella, se encontraban Goten y Trunks añadiendo más platos a su comanda. Al decir que era para Capsula corp. no se lo pensaron dos veces y empezaron a prepararlo, no era la primera vez que hacían un pedido tan grande para ellos.
Con las ropas medio destrozadas por los golpes y ataque de energía, comían y bebían para recuperar las fuerzas gastadas.

~ Oye Bra, no dijistes que ibas a invitar a Pan? ~ le dijo Trunks que la tiene sentada frente de él ~

~ Y lo hice pero dijo que perdía mucho tiempo viniendo. ~ mintió ya que nunca dijo eso ~

~ La señorita soy más veloz que tú se quejó de tardar? ~ Pan se lo dijo infinidad de veces lo rápida que era y que en eso le ganaba ~

~ Es posible que alguien le hiciera algo y no quiera verlo ~ le dijo mirándolo acusadoramente. Mirai tosió cuando se atraganto con la comida por culpa de la frase de Bra. Sabía que iba para su contra parte. ~ Te encuentras bien? ~ dándole colpecitos en la espalda ~

~ Sí, solo se me ha ido por el otro lado.

Trunks lo miró con dudas, llegó a pensar que fue él quien le hizo algo como su hermana dijo pero se deshizo de esos pensamientos, bien sabía que Pan no pasó durante estos días por casa, la hubiera visto o detectado por el ki. Entonces se acordó de otra persona, la que tenía a su lado, lo miró inquisitivamente.
Goten noto la mirada de su amigo y giró su cara para mirarlo con la boca llena de comida.

Antes de que te vayas                                              TrupanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora