"La Criada Con Un Sueldo Excesivo"
Unos días más tarde, HeeSeung estaba tumbado en su cama contemplando el techo.
La pintura blanca, agrietada y desconchada, producía un efecto muy desagradable, a diferencia de la pintura de la casa de Berlín, que nunca se saltaba y todos los veranos recibía una capa nueva cuando Madre llamaba a los pintores. Entornó los ojos para tratar de determinar qué había tras las finas y largas grietas.
Imaginó que en el espacio entre la pintura y el techo vivían insectos que la empujaban y resquebrajaban,
intentando crear un hueco por donde colarse para luego escapar por una ventana.Nadie, pensó HeeSeung, ni siquiera los insectos, elegirían quedarse en Auschwitz.
- Aquí todo es horrible - dijo en voz alta, aunque estaba solo en la habitación, pero oírse decirlo le hacía sentir mejor -. Odio esta casa, odio mi habitación y hasta odio la pintura. Lo odio todo. Absolutamente todo. -
Acababa de decirlo cuando MiSuk entró por la puerta, cargada con un montón de ropa lavada y planchada de HeeSeung. Vaciló un momento al verlo allí tumbado, pero inclinó la cabeza y se dirigió en silencio hacia el armario.
- Hola - dijo HeeSeung; aunque hablar con una criada no era lo mismo que hacerlo con amigos, no había nadie más por allí con quien mantener una conversación, y era mucho más lógico que hablar solo.
No había visto a EunJi por ninguna parte y comenzaba a preocuparle la posibilidad de enloquecer de aburrimiento.
- Señorito HeeSeung - saludó MiSuk con voz queda, mientras separaba las camisetas de los pantalones y la ropa interior, para luego acomodarlo todo en diferentes cajones y estantes.
- Supongo que estás tan descontenta como yo con este nuevo plan - dijo HeeSeung. La criada lo miró con cara de incomprensión-. Con esto -explicó, incorporándose y mirando alrededor-. Todo esto. ¿Verdad que es espantoso? Tú también lo odias, ¿No? -
MiSuk fue a responder pero se contuvo y, tras vacilar un instante, se puso a gesticular con la boca, como probando diversas palabras que no acababa de juzgar
apropiadas. HeeSeung la conocía de toda la vida (MiSuk había empezado a trabajar para ellos cuando él tenía sólo tres años), y en general siempre se habían llevado bien, pero hasta entonces ella nunca había dado señales de tener vida propia.Se limitaba a hacer su trabajo: sacar el polvo, lavar la ropa, ayudar con la compra y en la cocina; a veces llevaba a HeeSeung a la escuela y lo iba a buscar, aunque desde su noveno cumpleaños decidió que ya era bastante mayor para ir a la escuela y volver a casa
solo.- ¿Qué pasa? ¿No te gusta esto? - Preguntó al fin la criada.
- ¿Gustarme? -Replicó HeeSeung con una débil risita- ¿Gustarme? - Repitió con mayor énfasis- ¡Pues claro que no me gusta! Es espantoso. No hay nada que hacer, nadie con quien hablar o jugar. No irás a decirme que estás contenta de que nos hayamos mudado aquí, ¿Verdad? -
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𝐓𝐡𝐞 𝐁𝐨𝐲 𝐈𝐧 𝐓𝐡𝐞 𝐒𝐭𝐫𝐢𝐩𝐞𝐝 𝐏𝐚𝐣𝐚𝐦𝐚𝐬 ☁︎ 𝐇𝐞𝐞𝐉𝐚𝐲
Fanfictionఌ︎ 𝐹𝑎𝑛𝑓𝑖𝑐𝑡𝑖𝑜𝑛 / 𝐶𝑜𝑚𝑝𝑙𝑒𝑡𝑜 ᯽ 𝐻𝑒𝑒𝑆𝑒𝑢𝑛𝑔 𝑐𝑜𝑛𝑜𝑐𝑒 𝑎 𝑢𝑛 𝑐ℎ𝑖𝑐𝑜 𝑗𝑢𝑑𝑖̄𝑜. 𝐽𝑎𝑦 𝑐𝑜𝑛𝑜𝑐𝑒 𝑎 𝑠𝑢 𝑢́𝑛𝑖𝑐𝑜 𝑎𝑚𝑖𝑔𝑜. ✫ 𝐇𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐎𝐫𝐢𝐠𝐢𝐧𝐚𝐥 ✫ - 𝐶𝑎𝑚𝑏𝑖𝑜...