El Deber (SiChul) (Super Junior)

18

Choi Siwon veia al bebé, Mingook lloraba desconsolado, no le gustaba como habia sido alejado de quienes le daban mimos, extrañaba a su hermanita y tenia hambre.

Siwon... - Heechul entró al cuarto – Mingook!?

Heechul corrió a quitarselo de los brazos, ahí recién el bebé parecia calmarse al reconocer su olor.

Parece que te reconoce... – Siwon sonrió orgulloso.

Fui el segundo en cargarlo – dijo Heechul mesiendo al bebé y besando su frente - ¿Cómo lo secuestraste?

... - Choi lo miro feo – yo no hize nada... solo le sugerí a tus padres que tú estabas de vuelta, pero que hacia falta tanto mi heredero como su hijo...

... - Hee dejo al bebé acostando en la cama y se le acercó - ¿Qué le hizo a mi nuero?

Nada... - Siwon lo miro con indiferencia – estaba en el parque con la madre de Lee y la niña... me dijo que mató a uno demonio y quito del camino a la niña...

... - Heechul palideció temeroso – mi madre golpeó a Kim Donghae... golpeo a mi nieta...

No se si golpeo a la niña – acuso Choi molestó.

Tú no entiendes lo que acabas de permitir – acuso Hee preocupado – lastimaste a una lider de una facción de la Triada del Tigre, que también es hija de una lider principal y que también es cuñada de una sub-lider de otra facción...

No me da miedo – acuso Siwon indiferente.

Lastimaste a la madre de mi nuero, secuestraste a mi nieto... - Heechul lo miro preocupado – Taemin acabará contigo...

Siwon lo agarró del cuello.

Cierra la puta boca – gruño apretando su cuello – no me importa que un doncel venga a pedirme a su hijo de vuelta...

Taemin no es un doncel cualquiera – dijo Heechul – crees que deje que cualquiera esté con mis mellizos... Park ya te mostró su fuerza, Lee también, y acabas de invocar a una bestia... que no te tendra piedad, ni siquiera porque eres el padre del hombre que ama...

Lo tiró al suelo y lo vio con enojo.

Que venga ese doncel, no le tengo miedo – dijo con desprecio saliendo de la habitación y cerrando con seguro.

Heechul se puso de pie y se acercó al bebé, que lloraba aun desconsolado.

Tranquilo, aquí esta ajuhmma – susurró calmando al bebé que se movía y gimoteaba – sé que extrañas a omma y a noona... incluso a tu appa... todo estará bien...