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—Podríamos sacarte del país —Propuso el manager Lee dando ideas al aire porqué Mo no colaboraba mucho—. No, incluso del continente, ¿Qué tal américa? en Estados Unidos son muy liberales con el tema de las drogas, podrás rehabilitarte tranquilamente ahí.

Mo Guan Shan no dio respuesta, ni siquiera lo miró, y He Tian que seguía ahí sólo para ver si podría por fin completar la historia clínica para irse, se veía absorto por la conversación, o por la habilidad que tenía Mo para ignorar cuando le hablaban todo el tiempo. En fin, para He Tian no era tema nuevo que personas de peso hablaran de eludir responsabilidades legales de una u otra forma. Sólo tenía que mirar a su hermano mayor, He Cheng.

—Será difícil conseguir a un instructor que hable chino, pero podemos intentarlo.

—Se supone que tendremos una gira nacional en dos meses, no puedo irme del país y faltar a los ensayos de la banda ni a las grabaciones del nuevo álbum. Ni She Li ni la disquera van a estar de acuerdo.

Y el plan del hombre mayor se desmorono. Ciertamente podrían sacar a Mo Guan Shan del país, pero no podía apartarse por mayor tiempo a una semana, e incluso si saliera de la vista del ojo público tan de repente sería demasiado sospechoso.

—Podrían rehabilitarlo aquí —sugirió He Tian de la nada metiéndose en la conversación que realmente no le incumbía. Los otros dos lo miraron extrañados—. Tenemos varias personas con dinero que pasan por estos problemas; se drogan, se quieren desintoxicar pero no quieren tener el revuelo ni los asuntos legales que conlleva aceptar que cometen un delito, por lo que el centro de rehabilitación se mantiene bajo perfil siempre y cuando tengan la disponibilidad de pagarlo. No creo que tengan mejores opciones.

Ninguno respondió a eso, He Tian sólo suspiro y dejo la hoja que debía ser llenada con los datos del paciente en las manos del tal Lee diciéndole que la llenara, que él pasaría luego a buscarla. Y sin tomarse más molestias salió de ahí, estaba muy cansado del asunto y aún tenía cosas de hacer.

Dentro de la habitación ambos hombres quedaron pensando en lo que el pelinegro había dicho. El mayor de los dos sacó una lapicera de su bolsillo y empezó llenar los campos blancos.

—Suena muy conveniente —admitió Lee recostándose en el espaldar de la silla.

—Manager Lee —Mo lo miro, teniendo la atención del contrario sobre él dudo si debía proseguir—. Alguien puso alcohol en mi camerino anoche.

—¿Qué?

—El doctor dijo que lo que causo una sobredosis fue la mezcla de cocaína con alcohol... alguien debió darme alcohol mientras estaba drogado.

—¿Qué clase de idiotez estás diciendo Mo? ¿Estás seguro de que simplement...

—Lo mismo pensé, pero pude ver el examen de sangre que me hicieron, tanto el doctor de antes como una enfermera dicen que hay rastros de alcohol, nadie aquí tiene un motivo para mentirme —Su cabeza repitió las palabras que el doctor de mirada siniestra le había dicho, de sólo pensarlo le ponía los pelos de punta—. Es peor cuando intento recordar de dónde salió esa puta botella... no era una botella de alcohol, era una botella de agua, y ni siquiera estaba sellada.

Entonces Lee guardo silencio esperando que Mo siguiera hablando.

—Esa noche no tomé nada más que una botella de agua que estaba en la mesa de mi camerino. No puede haber error, tuvo que ser eso —pero aun así, ¿Cómo llego eso ahí?—. Alguien... alguien quiso sabotearme.

El gerente miro a Mo Guan Shan como si estuviera loco y atrapado en su paranoia, bueno, para él no era raro verlo desconfiar hasta del suelo que pisaba.

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