¿Que pasaría si un chico que odia las fiestas y una chica que las ama se encuentran erróneamente una noche uniendo sus vidas desgraciadamente para siempre con un bebé de por medio?
⚠️ Vida adolescente⚠️
Esta historia no busca ofender a nadie,si no t...
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En el tiempo que estuve allá,perdí completamente la comunicación con todos menos mi hermano y Mikky.
Muchos podrán pensar que volví a Barcelona,pero no.Era exactamente 20 de mayo,el Fútbol Club Barcelona había ganado Laliga y estaría allí para cuando la recibiesen.Mis gemelos habían nacido demasiado rápido,en el mes 8.Tenían exactamente tres meses.Quise ponerle al mayor "Pedro" y al menor "Abel" quizás no rimaban tanto,pero esos nombres me fascinaban.
Después de unos meses modelando en Países Bajos,me encontraba en Barcelona con mis hijos.Por suerte tenía un ayudante con mis bebés,era difícil cargar a dos niños.
Podrán pensar que me olvide de mi amor por Pedri,pero no,siempre que podía veía sus partidos,sus entrevistas y todo aquello que era relacionado con el.
Llegue al estadio y vi a Mikky a los lejos,estaba emocionada,demasiado diría yo.Corrí a ella y la abrace lo más que pude.
— ¿Eres tú? — dijo ella quitando todo el cabello que había en mi cara.
Le mire confundida. — ¿A que otra rubia con nombre unisex conoces?
Río ante mi comentario y me abrazó más fuerte.
— Te extrañamos demasiado Gabriel,todos. — reaccionó. — ¡Los gemelos! — dijo desesperada mirando a todos los lados.
Camine a donde estaban mis bebés y los cargué.
— Te presentó a Pedro y a Abel. — dije sonriendo.
Mikky me miro orgullosa y a punto de llorar,no sabía si cargar a los bebés.
— Adelante,los puedes cargar.
En ese instante llegó Anna Lewandowska.
— ¿Gabriel? — dijo sorprendida. — ¡Oh por dios!
Me abrazó.
— ¡Hola! — dije riéndome.
— Los gemelos... — dijo señalándolos.Nunca me habían mirado de esa manera.
Anna Lewandoska tomó a Pedro y Mikky tomó a Abel y comenzó a jugar con el.
— Son muy lindos. — dijeron ambas al unísono.
— Quien pudiera decir que Ansu tuvo razón al decir que eran gemelos.
Caminamos a las gradas y vi a Sira,estaba a punto de morir.
— ¡Sira! — grite corriendo a ella.
— ¡Mi vida! — corrió también a mi.
La abrace lo más fuerte que pude,le extrañe demasiado.
— ¿Como estás?
— ¡Bien! Todo ha salido bien. — dije separándome del abrazo.