le había dicho que no le haría nada si le curaba. Obviamente le mintió, lo golpeo mucho, tanto que Mesut solo pensaba en morir así podría dejar de sufrir.
habían lágrimas y sangre mezcladas en el suelo, quería hablar, rogarle que lo dejará, hacer todo lo que él quisiera pero que parase.
luego de unos minutos, él se detuvo para agarrarlo del cabello y levantarlo. Iba a golpearle le cara, eso pensaba, así que aprovecho a gritarle antes de que eso sucediera.
- ¡déjame, por favor!, ¡perdóname!, ¡p-perdón, Sergio! Ya.. Ya no puedo más -le pidió mientras lloraba- haré lo que quieras, lo que sea pero para, por favor.
el español lo miro por unos segundos, luego lo tiro al suelo bruscamente.
- ahora vengo, deja de mariconear y ve a la cama. No pienses en hacer otra estupidez.
dejo solo al alemán.
le dolía todo el cuerpo, su nariz y su boca sangraban, su labio estaba roto, en sus brazos y piernas ya se marcaban algunos moretones. No podía dejar de temblar.
con las pocas fuerzas que tenía se puso de pie y, agarrándose de los muebles para no caerse, se tiro a la cama.
no paraba de llorar, se sentía muy mal, quería llamar a Iker y pedirle ayuda.. ¿y si Sergio lo mataba ahora? No podía pensar en otra cosa.
¿y como podría llamarlo? Su pareja había roto su teléfono. Miro a sus alrededores.
"son las 11.. Casi dos horas estuvo golpeandome"
pensó viendo el reloj de la pared.
siguió observando, pensando que algo iba a encontrar que pueda servirle ahora.
y, con la suerte un poco de su lado, vio un teletrófono en la mesita de luz.
con dolor se acerco unos pocos centímetros, gracias a Dios, sabía como usar ese tipo de teléfonos y se acordaba el número de su amigo, con quien hablaba a veces por las noches hace años cuando el español no tenía teléfono.
-con mucho miedo y viendo a la puerta, puso el aparato en su oído y toco con rapidez loa números. No tardaron tanto en atender- ¿Iker?
- ¿Mes? Oh, Mesut, Dios, extrañaba tanto oír tu voz -se escucho desde la linea- ¿que sucede? ¿estas bien?
- me esta golpeando, ayúdame, por favor, te lo ruego, Iker.. -pedía mientras lloraba-
- ¿que? ¿como que te golpeo? Dios, tranquilo, yo te sacare de allí, lo prometo. Dime la dirección y aguanta.
- e-es.. Carrer de Còrsega 224, por favor, rápido, me va a matar, me va a matar..
- tranquilo, tranquilo, Mes, te prometo que saldrás sano y salvo de ese infierno, te lo juro.
- por favor, lo escucho, esta viniendo..
lo primero que se le ocurrió fue ocultar el teletrófono, sin decir mucho le colgó a Iker antes de ocultar el aparato.
- Mesut -lo llamo- ya deja de temblar, no seas marica.
lo pareció raro a Özil ver a su pareja llegar con dos maletas y dejarlas en el suelo.
- perdón..
- .. Quiero decirte algo. Nos iremos de Madrid, iremos a otra parte de España mañana.
¿por qué de la nada le decía eso? ¿se dio cuenta de lo que hizo el menor? No, no lo cree pero lo piensa.
-mientras el menor temblaba, incluso intentando no hacerlo, lo vio algo sorprendido- ¿q-qué? Pero la escuela..
- la escuela es una gilipollez, no sirve de nada, no quiero escuchar una sola queja, ahora nos iremos a dormir.. -dijo el rubio dejando su teléfono en la mesita de luz-
pero noto algo.
- Mesut, ¿el teletrófono donde está?
